Diez insta al PSOE a madurar la reflexión sobre la opción de abstenerse para evitar la entrada de Vox en la Junta
El resultado electoral del domingo en Castilla y León ha dejado al PSOE en una disyuntiva a la que este martes el alcalde de León, el socialista José Antonio Diez, le puso letra: “¿Qué es mejor: que entre la extrema derecha (en la Junta) o un Gobierno en minoría (del PP) abocado a llegar a muchísimos acuerdos?”. Aunque el regidor no respondió con claridad a su pregunta, sí instó a su partido a madurar la reflexión, aun siendo consciente de que la decisión tiene “muchísimas aristas”. “El debate es complicado, pero merece una reflexión; no una respuesta a bote pronto”, señaló este martes en una entrevista concedida al programa de Carlos Alsina en Onda Cero 'Más de uno'.
Diez apela a realizar “una reflexión profunda” tras sentenciar que el actual presidente en funciones y candidato a la reelección por el PP, Alfonso Fernández Mañueco, ya sabía cuál sería el escenario poselectoral cuando adelantó los comicios: “Era evidente que el partido de Ciudadanos iba prácticamente a extinguirse y que su lugar lo iba a ocupar un partido de extrema derecha como Vox. Quien convocó ya sabía a qué iba a enfrentarse”.
Así las cosas, Diez pone la coyuntura actual como “magnífico ejemplo” de la cuestión recurrente de implantar “cordones sanitarios frente a la extrema derecha”. Dicho esto, el regidor no obvió a renglón seguido resaltar que el PP de Castilla y León “no es un PP estándar”, aseguró al atribuirle “35 años de desgobierno” y “decenas de casos” de corrupción. “Está plagado de casos de corrupción”, abundó.
Ante los micrófonos de Onda Cero, el regidor de la capital leonesa reconoció que “hay muchos pros y contras”. Y es que, tras desacreditar al PP, cargó contra Vox por entrar al debate “ya con una absoluta presión” sobre los populares al poner sobre la mesa la derogación de leyes “que han tardado en conseguirse muchísimos años en materia de igualdad”. “No hablan de cómo afrontar la despoblación, ni cómo generar riqueza, ni cómo industrializar el territorio (...). Y eso denota a qué ha venido este partido: no a contribuir al desarrollo de esta tierra, sino a practicar sus políticas más extremistas, más dañinas y que más perjuicio pueden crear a la sociedad”.
Diez fue así poniendo pesas en los dos lados de la balanza después de que su homólogo en Valladolid, el también socialista Óscar Puente, se mostrara este lunes partidario de que el PSOE ofrezca al PP la abstención para evitar un pacto con Vox, una posibilidad en principio descartada por Ferraz.
Sin mostrarse tan explícito como su colega pucelano, José Antonio Diez cree que “cabe todavía una mayor reflexión”. “Esto requiere de un poso, porque esta decisión tiene muchísimas aristas. Hay que tomar un camino. Ninguno de ellos es fácil e incluso entendible por parte de la ciudadanía y la militancia. ¿Qué es mejor: que entre la extrema derecha o un gobierno en minoría abocado a llegar a muchísimos acuerdos?”, se preguntó en voz alta. Sin llegar a responderse, instó a su partido a pensar “no sólo lo que es mejor para los socialistas, sino para todos los leoneses y castellanos”.
El alcalde de León, que ya este lunes en una primera reacción felicitó a la UPL por su “magnífico resultado” e instó su partido a “recoger el mensaje de los ciudadanos” sobre el “descontento” que percibe con su encaje territorial en la Comunidad, asume que el PSOE “podría poner condiciones” llegado el caso de que el PP pidiera una abstención para alejar a Vox del poder. “En política no hay nada gratis”, advirtió Diez, para quien “sería un error desoír” lo que los ciudadanos dijeron el domingo en las urnas. Sobre el dilema de fondo (permitir o no que Vox entre en la Junta), cuando Alsina puso esa opción como “la peor”, contestó: “Si esa es la peor, cualquier otra cosa será mejor. Será mejor que la peor”.
