Veterinarios para canguros

Ilustración de Inteligencia Artificial sobre Educación.

Está muy bien formar profesionales en sanidad animal, por ejemplo, y no hay quien lo dude. ¿Pero de qué nos serviría formar en España los mejores veterinarios del mundo para canguros? Seguro que el gobierno de Australia estaría encantado de hacerles luego unas magníficas ofertas económicas para que se trasladasen al país austral, ya formados a costa de los contribuyentes españoles.

¿Si hiciésemos tal cosa seríamos unos perfectos idiotas, verdad? Pues el caso es que lo hacemos, constantemente, en otras muchas ramas, y a todos los niveles. Como el tema de la Educación y su coste parecen ser tabúes, se gasta lo que haya que gastar en formar profesionales destinados a ala emigración, de modo que aquí hacemos el gasto para que luego trabajen fuera, coticen fuera, y si te he visto no me acuerdo.

Médicos y enfermeros se van a puñados a países donde les pagan mejor, mientras nosotros descapitalizamos, del mismo modo, la sanidad de países más pobres que el nuestro. Se trata de una pirámide vergonzosa en la que los pobres pagan y los ricos reciben el beneficio de lo invertido por lo menos pudientes, una pirámide, además, aplaudida desde la derecha por aquello de la libertad de mercado y desde la izquierda por aquello de que la educación es siempre buena, y que la paguen los ricos.

Pero el caso es que todos esos costes no salen de los bolsillos de los ricos, sino que salen de todos, y si es lícito pedir que se racionalice el gasto en energía, por ejemplo, igual de lícito es exigir que se deje de una vez de subvencionar a los países más ricos de nuestro entorno.

Hay que llamar de una vez a las cosas por su nombre. Cuando se le concede una beca de estudios a un estudiante brillante de un país africano, lo que se está haciendo, las más de las veces, es saquear a ese país, extrayendo su talento y atándolo al subdesarrollo. Y es duro decir esto, pero hasta un 70% de los que vienen a Europa a estudiar, procedentes de naciones africanas, ejercen después aquí su profesión y no regresan nunca. Las cifras de América latina no son mucho mejores.

De lo que sucede con los que se van a Estados Unidos no tengo datos, pero no creo que sea muy distinto.

Y a nosotros nos está pasando igual. Formamos ingenieros que se marchan, médicos y enfermeros que se marchan, técnicos y especialistas que han hecho aquí todo el gasto y no van a cotizar nunca en nuestro país ni a aportar la riqueza que se invirtió en ellos.

No digo que haya que dejar de invertir en educación, pero creo que hay que hacer algo, lo que sea, para dejar de formar veterinarios para canguros.

O si no, que los pague Australia.

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