Casa Suncia, el placer de comer tradicionales exquisiteces en Gijón
Gijón bulle cada verano. Visitantes, cientos de ellos leoneses, pero también asturianos de toda la vida saben perfectamente dónde llevarse a la boca el auténtico sabor del Cantábrico, el sabor del mar pero también el sabor del monte, todo ello con un toque de cocina casera con la calidad de siempre, a un precio excelente y en un rincón verde y acogedor.
El Restaurante Sidrería Casa Suncia permite al amante de las exquisiteces y la tradición disfrutar de una carta variada donde las haya.
Destacan los arroces (con rabo de toro, con jabalí, de marisco, con pitu de caleya, con bugre...); refrescan y llenan las ensaladas (con perdiz, con queso de cabra, con pulpo, con bacalao...); acompañan a los culines de sidra las variadas tapas (callos, tortillas de muchas clases, calamares, gambas, croquetas, chipirones...); y por supuesto, alimentan cuerpo y alma los pucheros más tradicionales del Paraíso Natural que es Asturias, con la fabada o las fabes con almejas.
Todo ello se puede degustar en este establecimiento situado en Somió, en un lugar privilegiado de Gijón, con terrazas cubierta y exterior, un jardín acogedor y zona infantil de juegos, además de amplio aparcamiento.
Eso si se va en coche, porque en la puerta del Restaurante Sidrería Casa Suncia tiene parada el autobús urbano de la línea 10 de Gijón para mayor comodidad. No en vano, el local queda muy a mano de la Universidad Laboral o el Jardín Botánico, entre otros puntos neurálgicos de Gijón.
Santiago Rivero lo regenta “desde hace 31 años ya”. Pero le viene de familia: su abuela abrió en 1939 lo que entonces fue un concurrido colmado de ultramarinos. Porque el buen comer viene de lejos y es mejor si pasa de generación en generación.
El verano es un momento especial para disfrutar las delicias de Casa Suncia, pero no el único momento. Porque Santiago, amante de la caza, ofrece todo el año una carta poderosa y variada. Y algunas jornadas gastronómicas muy especiales, con venado, jabalí, corzo, perdiz o codorniz, la cual preparan en su cocina dentro de un jugoso pimiento leonés de Fresno de la Vega.
Por todo ello, el Restaurante Sidrería Casa Suncia tiene el sabor de siempre atendido como nunca, incluso con el relevo generacional pisando fuerte, gracias a la maestría de su hijo Andrés, que forma parte de quienes atienden sus fogones. Es, sin duda, una suculenta referencia en un Gijón que sabe ganarse a todo el mundo por el paladar.