CSIF teme que el plan de sanidad rural agrave los problemas de las urgencias en los pueblos

César Sánchez / Ical

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La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) considera que el nuevo plan de sanidad para el medio rural, aprobado por el Consejo de Gobierno de la Junta, presenta un modelo de Atención Primaria que consiste, básicamente, en aumentar a 24 horas las guardias rurales. Es decir, el sindicato teme que se extiendan los actuales problemas en los servicios de urgencias de los centros de salud rurales para, “potencialmente”, reducir los problemas de la atención diaria en los consultorios locales.

El presidente del sector autonómico de Sanidad de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), Juan Carlos Gutiérrez-Rodilla, consideró que el modelo planteado por la Junta requiere de un mayor número de profesionales de los que Sacyl estará dispuesto a contratar, y teme que los avisos a domicilio se van a multiplicar por las características de la población rural. Se pregunta, además, si la atención sanitaria rural se va a convertir en una atención a demanda, lo que supondrá olvidarse de la atención programada actual, “que tanta calidad ha dado a nuestro sistema sanitario y a la salud de los usuarios”.

CSIF exige que la Junta retire el nuevo plan sanitario, porque se ha sacado adelante de manera precipitada, improvisada, sin hablar previamente con los profesionales que conocen “de verdad” la situación, ya que no ha habido ningún encuentro ni reunión con los representantes sindicales. “Ha faltado información y transparencia, debate, negociación, y hay que aclarar y analizar muchas cuestiones en torno a los consultorios rurales agrupados que se pretenden crear (tienen las mismas iniciales -CRA- que los centros educativos)”, recoge un comunicado.

El sindicato instó a “recapacitar” al Gobierno regional y Sacyl y paralizar las experiencias piloto que se pretende poner en marcha, como el de la comarca de Aliste (Zamora). Además, reclamó que se reconduzca el asunto desde el diálogo y el debate con los sindicatos. “Somos conscientes de que hay que mejorar pero sin reducir la calidad de la atención sanitaria en la Comunidad, y muy especialmente en el medio rural”, expresó Gutiérrez-Rodilla.

CSIF asegura que, con independencia de “cómo se explique o se adorne”, la realidad es que, con el nuevo plan de Sanidad, los consultorios locales de los pequeños pueblos dejarán de existir como se conocen ahora. “Se quedarán sin médicos o se cerrarán parcialmente los consultorios locales, sustituyéndose por una atención médica por teléfono o a demanda, desde los futuros consultorios agrupados, que no se sabe cómo va a ser o cómo se va a organizar”, añadió la nota

CSIF desconoce que si este plan de la Consejería es un “globo sonda o no”, pero reconoce que ha dejado “muy inquietos” a los profesionales sanitarios y a la población rural, que ya vive la experiencia del transporte a la demanda.

Frivolidad de Casado e Igea

Ante esta situación, Gutiérrez-Rodilla reclamó al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, que obligue, “a quien corresponda, de una vez por todas”, a trabajar para dar respuesta a los “gravísimos” problemas de la sanidad de la Comunidad. “Que la consejera Verónica Casado y el vicepresidente Francisco Igea dejen de filosofar y de divagar con tantas otras tonterías y globos sondas, que con eso no se curan nuestros enfermos. Que empleen su tiempo en trabajar por nuestros profesionales sanitarios, y se dejen de tanto viaje para destituir gerentes a los que, luego, colocan en otros sitios. La frivolidad con que están actuando es la típica de un adolescente irreflexivo”, sentenció.

Además, afirmó que para llevar a cabo el nuevo plan de sanidad rural sería necesario afrontar un cambio en la organización de los equipos de Atención Primaria, redefiniendo sus funciones, como en el caso del coordinador de equipo y de la responsable de enfermería de Atención Primaria.

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