La protesta contra los recortes en Pediatría crece en La Bañeza y suma ya más de mil personas en la calle
Más de mil personas acudieron este martes a la nueva protesta convocada, esta vez en un recorrido por las calles de la ciudad leonesa de La Bañeza, para exigir una atención pediátrica digna, estable y de calidad.
Convocados por la indignación ante la precariedad sanitaria que vive la comarca, y también alentados por las declaraciones del consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Alejandro Vázquez, negando que haya faltado personal y se hayan recortado los días de atención a las familias, los asistentes aprovecharon para reclamar la dimisión del máximo responsable de Sanidad en Castilla y León. “Hoy no tendríamos que estar aquí si usted hiciese bien su trabajo”, se escuchó en el encendido discurso que cerró el acto, interpelando directamente al responsable autonómico.
Durante la movilización, se denunció que los niños deben esperar hasta diez días para conseguir una cita médica, pese a que el consejero sostiene que el servicio está cubierto. “¿Eso es estar atendidos? ¿Se ríe usted en nuestra cara?”, cuestionó el texto leído públicamente, desafiando al consejero a presentarse en La Bañeza y hablar con las familias afectadas, de quienes, aseguraron, desconoce incluso su ubicación en el mapa.
El discurso puso el foco en el uso del presupuesto sanitario: un aumento del 2,7% en 2024, equivalente a 126 millones de euros, que no se ha traducido en contratos estables. En cambio, se ha destinado a más personal eventual y asesores. “¿Por qué nuestros hijos solo merecen médicos rotativos?”, se preguntó la portavoz, mientras se denunciaba también la contratación de médicos sin el MIR y la falta de actualización frecuente de las bolsas de empleo sanitario.
Otro dato alarmante fue la escasa cobertura de plazas de pediatría en la provincia: de 2022 a 2024 solo se cubrieron diez, ocho de ellas en el hospital. “¿Dónde están las contrataciones fijas en el medio rural?”, reclamaron los organizadores, insistiendo en la necesidad de incentivos para atraer profesionales a zonas desfavorecidas, como ya hacen otras comunidades autónomas.
Castilla y León lidera la pérdida de profesionales sanitarios en España, una situación que, según los manifestantes, responde más a una mala gestión que a la escasez de personal. “No más excusas. No más balones fuera”, concluyó el discurso, que acabó con un grito de fuerza y determinación: “La fuerza que una madre saca por sus hijos mueve montañas. Y esta, por ellos, la vamos a mover”. Las protestas continuarán.