El PCE del Bierzo denuncia ausencia de medidas de reindustrialización ante el cierre de la central de Compostilla

Foto Mario de la Torre

ICAL

La secretaria política del Partido Comunista (PCE) del Bierzo, Isabel Maroto, denunció hoy “la falta de compromiso” de los distintos gobiernos a la hora de impulsar “medidas reales de recolocación de los trabajadores y de reindustrialización” en la comarca, cuando quedan 300 días para que se produzca el cierre definitivo de la central térmica de Compostilla II, ubicada en Cubillos del Sil. Al respecto, el PCE apuesta por “aprovechar la tradición industrial y energética de la comarca” con nuevas iniciativas pilotadas por una empresa pública que trabaje en el campo de las energías renovables, en colaboración con una eléctrica pública y el reflote de las actividades en la Fundación Ciudad de la Energía (Ciuden).

A menos de un año para la clausura de una de las principales instalaciones industriales en la comarca Maroto criticó el “nefasto papel” de Endesa, propietaria de la central, con respecto a los trabajadores de las subcontratas. En total, son 180 familias afectadas por esta situación, “con el visto bueno del Gobierno de Sánchez y la Junta”, denunció la líder de la formación, que aseguró que “lo que el Gobierno ha vendido cómo transición justa es un cierre sin alternativas”.

En julio, el PCE organizó un encuentro en el Congreso entre los empleados de las empresas auxiliares de Compostilla y Enrique Santiago, diputado del grupo Unidas Podemos, para denunciar el “futuro incierto” a menos de un año del cierre. Los trabajadores trasladaron sus propuestas al dirigente comunista, que pasan por un plan social con bolsas de trabajo, empleo en las labores de desmantelamiento de la central, coeficiente reductor de la edad de jubilación para colectivos vulnerables y 'contador cero' para las prestaciones sociales de estos trabajadores.

En la misma línea, la dirigente del PCE quiso poner en valor la lucha de estos trabajadores. “La acampada de más de 200 días a las puertas de la central es un símbolo de la dignidad obrera, un referente para el resto de trabajadores y trabajadoras del Bierzo”, aseguró Maroto, que exigió a Junta y Gobierno que se comprometan con “las tres erres: recolocaciones, reindustrialización y renacionalización”, con un “papel fundamental” de la Sociedad Española de Participaciones Industriales (Sepi).

En ese sentido, apuntó que la industria de transformación agroindustrial también debe potenciarse “para no perder el valor añadido” y lanzó la idea de poner en marcha un proyecto integral de restauración de espacios degradados por la minería, que incluya el aprovechamiento público de recursos mineros para la producción de energía hidroeléctrica en pozos abandonados. “Es hora de reconstruir económicamente el Bierzo para recuperar el futuro”, concluyó Maroto.

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