La música de la América colonial, en el Auditorio

ICAL

La agrupación de música antigua Harmonia del Parnàs llega mañana al Auditorio 'Ciudad de León' dentro del noveno ciclo de Músicas Históricas, y lo hará con un programa sobre los músicos que viajaron a América en la época colonial. La firme apuesta de esta agrupación por la recuperación rigurosa del patrimonio musical español ha quedado demostrada en el más de un centenar de obras rescatadas por primera vez en tiempos modernos, no sólo en concierto, sino también en cinco grandes grabaciones discográficas.

En esta ocasión, Harmonia aborda una propuesta “mestiza”, acercándose a unas fuentes resultantes del cruce de varias culturas. Hay que tener presente que cuando los conquistadores llegaron a América intentaron imponer la música que traían de sus lugares de origen. El resultado final fue la mezcla con la arraigada tradición musical indígena que originó unas formas sonoras en las que la percusión, la voz y los instrumentos de viento serían los grandes protagonistas.

El programa de mañana, '¡Hazó, Antón!', propone un viaje de ida y vuelta que recorre los sonidos de los músicos españoles y europeos que viajaron a América durante el periodo colonial, así como las fuentes musicales que llegaron de uno u otro modo hasta ultramar, e incluso las piezas finalmente compuestas por los propios autores autóctonos en las que resulta más que evidente la mezcla entre los rasgos de la música culta occidental y las particularidades de los ritmos, melodías e instrumentos más puramente indígenas.

Este cruce no sólo de músicas sino también de culturas, lenguas, creencias y costumbres no hizo sino enriquecer un patrimonio sonoro que asimismo realizaría un viaje de vuelta hacia la Península y dejaría también su huella en la composición de muchos de los principales maestros de nuestras capillas, como resulta ser el caso, por ejemplo, del villancico que da título al programa '¡Hazó, Antón!', de Juan Barter.

Entre las piezas escogidas, conservadas entre otros lugares en los archivos de Chiquitos (Bolivia) y de las catedrales de Guatemala y Bogotá, resultan especialmente exóticas las que hacen uso de algunas de las curiosas lenguas autóctonas, como es el caso de los anónimos 'Zoiyaî Jesús', 'Aquí ta naqui' y 'Caîma, Iyaî Jesús'. Junto a ellas, el oyente podrá percibir las características del moderno Barroco italiano en la triosonata chiquitana o en las antífonas latinas de vísperas propuestas, así como ciertos rasgos muy arraigados en la composición española más tradicional en las místicas y sobrias piezas de Ximénez y Cascante escritas en castellano.

Por su parte, las obras más tardías recogidas en el programa dejan por una lado patente la gran influencia de la danza en la música americana, como podrá apreciarse en la xacarilla de uno de los autores guatemaltecos más prolíficos y representativos de la segunda mitad del siglo XVIII, Rafael A. Castellanos, y por otro, el dominio de la composición europea que llegaron a adquirir los propios compositores locales, como queda demostrado en la cantata 'Ya que el sol misterios'o del peruano Orejón y Aparicio, a menudo considerado por los musicólogos el compositor barroco más importante nacido en tierra americana.

Harmonia del Parnàs interpreta obras anteriores al 1800 con instrumentos y criterios históricos, respetando las particularidades estéticas y teóricas de cada lugar y periodo concreto. Su repertorio, escogido a partir de la investigación musicológica de fuentes musicales y documentales de archivos y bibliotecas de todo el mundo, recoge diferentes géneros y autores hispánicos de los siglos XV al XVIII, siendo sus interpretaciones el resultado de un estudiado ejercicio de equilibrio entre la musicología histórica y la creatividad musical.

Etiquetas
stats