La muerte de un interno en la cárcel de León acaba en una tensa trifulca de los presos del módulo más conflictivo
El hallazgo del cadáver de un interno en una celda del módulo 10 de la prisión provincial de León, la de Villahierro, ubicada en el municipio de Mansilla de las Mulas, ha provocado este martes una protesta de un grupo de reclusos y momentos de tensión, incluyendo un plante de protesta que ha afectado a altos cargos del centro.
Los presos, tras conocer la muerte del interno, por causas que aún se deben aclarar con la autopsia pero descartándose cualquier tipo de muerte violenta, ni autoinfligida ni externa, denunciaban los medios sanitarios del centro por entender que no se actuó con celeridad ante el caso. Según ha contrastado ILEÓN, la víctima fue encontrada sobre la cama en su celda, que permanecía cerrada, tapada con una sábana, tras notarse se ausencia en el recuento rutinario y aunque fue atendida no se pudo hacer nada por reanimarla.
Sin embargo, teniendo en cuenta que el módulo 10 es el que aglutina a presos con más expedientes por conflictividad, llegó a generar una importante tensión dentro del centro penitenciario. Esta situación obligó a intervenir a su directora, Henar García, y a otros altos cargos de la prisión para tratar de revertir la situación.
De hecho, fuentes sindicales consultadas por la agencia EFE concretan, sin entrar en más detalles que el incidente ha sido de carácter “grave” y que la directora y el resto de altos cargos de la prisión han permanecidos “retenidos” durante más de una hora para exigirles una mejora en las condiciones de vida del centro, especialmente en la atención sanitaria a los presos con problemas de adicciones.
Otras fuentes consultadas por ILEÓN matizan ese aparente motín, sin negar la tensión alcanzada por momentos, incluso con lanzamiento de algún objeto puntual, pero sin más resultado de “un manotazo” involuntario a un funcionario sin necesidad de atención médica siquiera.
Fuentes de Instituciones Penitenciarias confirman que “una vez apaciguados los ánimos han abandonado el lugar y la vida del centro ha continuado con total normalidad”. Además, han precisado que se ha abierto una investigación para determinar las causas del fallecimiento del recluso así como otra para determinar si la situación provocará también alguna decisión disciplinaria respecto a algunos reclusos que protestaron y su comportamiento.
