Los ministros europeos de Agricultura se reúnen este lunes para abordar la crisis del sector lácteo
Los ministros de Agricultura de la Unión Europea (UE) se reunirán mañana, lunes, en un consejo extraordinario para abordar la crisis del sector lácteo y acordar medidas ante el desplome de los precios de la leche. La ministra española de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, pidió el pasado lunes a la Comisión Europea (CE) que se sume a los esfuerzos puestos en marcha en España y otros países a favor del sector lácteo ante la caída de los precios.
En el marco de su encuentro con el comisario europeo de Agricultura, Phil Hogan, la ministra afirmó que el Gobierno español va a hacer “todo lo que sea legalmente posible y esté en nuestras manos”, pero matizó que la Comisión también tiene capacidad de actuación para regular un mercado europeo y le corresponde a ella regular ese mercado“. Este mismo mensaje fue el que transmitió el viernes a los ganaderos cuando recibió en la sede del ministerio a los organizadores de la 'Marcha Blanca', que ha realizado movilizaciones durante toda la semana, a los que animó a ”sumar voluntades“ para alcanzar un acuerdo unánime en el sector.
Por su parte, la Interprofesional láctea (Inlac), que engloba a todo el sector lácteo, señaló también el viernes en un comunicado que está trabajando en alcanzar un acuerdo que ponga fin a la a la crisis del sector.
Precio justo
Un día antes, el jueves, centenares de tractores y autobuses de agricultores llegados de toda Francia entraron en París para protestar contra la política agrícola de François Hollande, en particular en el sector porcino y lácteo.
La titular de Agricultura espera acordar medidas “eficaces” en el consejo de este lunes, para lo que mantuvo el pasado 28 de agosto una reunión de trabajo con los ministros de Agricultura de Francia, Stéphane Le Foll; de Italia, Maurizio Martina; y de Portugal, Assunçao Cristas, con el fin de preparar la reunión extraordinaria del lunes.
Los ganaderos exigen un precio “justo” para la leche que se mantenga a lo largo del tiempo y que cubra los costes de producción, así como evitar la competencia desleal en el mercado lácteo.
También piden desvincular los precios pagados por la leche a los productores europeos de los precios que se construyen en los mercados internacionales, distribuir más equilibradamente la producción en Europa protegiendo sus zonas más desfavorecidas y detener “de inmediato” las negociaciones de tratados de libre comercio que se están llevando a cabo por parte de la Comisión.
Los productores denuncian que el coste de producción de un litro de leche es de 34 céntimos, mientras que la media de lo que se está pagando a las explotaciones se sitúa entre los 28 y los 29 céntimos.
En la reunión del pasado 18 de agosto entre Agricultura y los representantes de la industria, la distribución y el sector lácteo en su conjunto, García Tejerina recalcó que fijar los precios es “legalmente imposible” y pidió a los productores una mayor organización y a las comunidades autónomas un “compromiso” con el sector.
Ayudas y acuerdo
El borrador de la propuesta de acuerdo planteado en esa reunión recoge el compromiso de las empresas de distribución alimentaria de poner en práctica de manera efectiva modalidades de compra de leche líquida y promover la identificación del país de origen de la leche y los productos lácteos.
Además, las industrias lácteas se comprometerían a aplicar en sus contratos precios de compra que permitan remunerar los costes de producción a los ganaderos, al menos para los volúmenes que venían produciendo hasta el pasado 1 de abril, así como promover la implantación de un contrato tipo compraventa de leche en el que se garantice al productor la recogida a un precio que permita sus sostenibilidad.
De su lado, las cooperativas y organizaciones agrarias promoverían la fusión efectiva de las cooperativas que vienen actuando como primeros compradores y la constitución de organizaciones de productores.
Además, García Tejerina anunció hace dos semanas que el Ejecutivo concederá una ayuda directa de unos 300 euros por vaca para aquellas explotaciones que estén vendiendo la leche por debajo de la rentabilidad. Agricultura estima que esta ayuda podría beneficiar a entre 2.500 y 3.000 explotaciones.
