León recupera unas navidades con nieve y ofrece 11,7 kilómetros esquiables
Los aficionados al esquí volverán a tener este año unas 'blancas navidades' en las estaciones invernales de la provincia leonesa, cosa que no ocurrió el pasado año, cuando la falta de nieve mantuvo cerradas tanto las instalaciones de San Isidro, en el municipio de Puebla de Lillo, como las de Valle de Laciana-Leitariegos, en Villablino; ambas gestionadas por la Diputación Provincial. La temporada no pudo iniciarse hasta el 18 de enero; ocasión que aprovecharon 6.826 personas durante el primer fin de semana de apertura.
Un año después la situación es bien distinta y según los datos que facilitan las propias estaciones, San Isidro ofrece hoy -con cielos despejados- un total de 10,3 kilómetros de pistas esquiables y tiene en servicio los sectores de Cebolledo, Riopinos y Requejines. Todos los accesos están abiertos y la nieve, de tipo dura, tiene entre diez y 25 centímetros de espesor.
En Leitariegos, también con cielos despejados y accesos abiertos, hay tres pistas y cuatro remontes disponibles con 1,4 kilómetros esquiables. La nieve es dura y presenta espesores mínimos de 15 centímetros y máximos de 30. En ambos recintos mañana, día de Nochebuena, se cerrará a las 13 horas, y el día de Navidad se abrirá a las diez de la mañana.
Hace ahora una década tampoco se pudo practicar el deporte blanco en las navidades en las estaciones leonesas, situación que también se dio en 2015, cuando la temporada de esquí no pudo abrirse hasta el 12 de enero, y a finales de 2006. Salvo esas excepciones, lo habitual es que los esquiadores puedan aprovechar la campaña festiva. Desde 2007, el récord de asistencia se logró en los últimos días de 2010 y primeros de 2011, con 42.294 usuarios; dato especialmente positivo si se tiene en cuenta el temporal de viento y nieve que obligó a cerrar las estaciones algunos días.