IU de León pide medidas de movilidad sostenible más allá de reducir velocidad a 30 kilómetros por hora
La organización local de Izquierda Unida León instó este miércoles al Ayuntamiento de la ciudad para que lleve a cabo una apuesta clara por la movilidad sostenible en la ciudad y establezca un plan de información, promoción y educación vial basada en las alternativas al coche, así como que “no convierta la campaña de sensibilización en una caza de brujas”.
Para la formación, “el trasporte alternativo al coche en las ciudades cada vez está tomando un mayor protagonismo”, por lo que la administración local “debe adecuarse en sus actuaciones organizativas y de desarrollo para promocionar estas formas de transporte y fomentarlas, tanto en las normativas propias o el urbanismo de la ciudad, pasando por campañas de información y difusión”.
La coordinadora local de Izquierda Unida, Carmen Franganillo, recordó al Ayuntamiento “que la simple reducción de la velocidad a 30 kilómetros por hora no es una medida que apoye a la movilidad sostenible”, sino que “debe haber un compromiso firme”. Asimismo, acusó al Consistorio de “omitir acciones de probado resultado como los aparcamientos disuasorios o mejorar el transporte público, que es bastante deficitario en León”.
Por este motivo, desde la formación sugirieron actuaciones inmediatas como ampliación de carriles bici y mejora del pavimento de los mismos, correcta señalización, campañas de información a la ciudadanía, una ordenanza de circulación ciclista que apoye de forma definitiva este medio de transporte en la ciudad y un servicio municipal de alquiler de bicicletas “digno”.
Asimismo, Izquierda Unida consideró que la campaña que inicia esta semana la Policía Local para el control de bicicletas y patinetes tiene que ir acompañada de información a los usuarios, por lo que pidieron que “no se convierta en una caza de brujas y tenga como objetivo una correcta convivencia entre bicis y peatones, manteniéndose el objetivo de fomentar el uso de medios de transporte sostenible”.
“Esperamos que en los próximos meses se siga dando importancia al uso de las aceras y zonas peatonales y se controlen los estacionamientos irregulares de coches sobre aceras o sobre pasos de peatones, además de rescatar el uso de la calle y las aceras para la ciudadanía y no para los negocios privados, dejando poco espacio tanto para el tránsito de peatones como para una fluida circulación”, concluyó Franganillo, para quien el Consistorio “debe presentar un plan serio y comprometido, así como una inversión adecuada para que León se convierta en una ciudad que sustituya el coche por medios de transporte no contaminantes”.