Hallan el cadáver de una joven amordazada en una vivienda del barrio de San Mamés
Una joven de 21 años ha sido hallada muerta y amordazada esta madrugada en su vivienda en la calle Menéndez y Pelayo, en el barrio San Mamés de la capital leonesa. Según han informado fuentes de la Subdelegación del Gobierno de León, el cuerpo ha sido localizado por un compañero de piso.
La mujer, que corresponde a las iniciales de D.CH, presentaba signos de violencia, y las primeras investigaciones apuntan a que podría haber sido asesinada hace varios días.
Comisionadas las dotaciones policiales al lugar de los hechos, sobre las 21.46 horas, recibida comunicación en la Sala 091, a través de la Coordinadora 112, de que en un piso de la calle Menéndez y Pelayo de esta ciudad ha sido encontrado sin vida el cuerpo de una mujer que tenía alquilada una habitación de una vivienda compartida, perciben de inmediato, que se trata de una muerte violenta, no descartando un posible estrangulamiento.
Se han iniciado las investigaciones correspondientes para la identificación de la autoría, instruyéndose el atestado, que se ha remitido al Juzgado número 4, en funciones de guardia, de esta capital. La Policía Nacional está interrogando a personas vinculadas al entorno de la víctima. De momento, no ha sido localizado el compañero sentimental de la joven, según han informado las mismas fuentes.
Los vecinos del barrio de San Mamés se mostraban conmocionados esta mañana tras conocer el suceso. Algunos que prácticamente no conocían a la joven, que residía allí desde fechas recientes y que podría haber recibido la visita de su compañero sentimental el último día que fue vista con vida.
Nadie oyó nada
“No se ha oído nada”. Así lo aseguró una vecina del inmueble donde ocurrieron los hechos, que se mostraba sorprendida e impactada tras lo ocurrido. “Me enteré cuando llegué a casa anoche y vi que había mucho policía. Esta chica ha aparecido nueva hace unos días y aquí vive desde hace unos meses un matrimonio con un bebé con los que nunca ha habido ningún problema”, añadió. Otros vecinos del edificio tampoco escucharon nada que les pudiera parece sospechoso días atrás. La misma sorpresa la muestran los residentes y comerciantes de la calle y del barrio, quienes aseguran que nunca se ha producido un hecho tan grave en la zona.
Incidentes anteriores
La familia que ocupaba el piso hasta la llegada de la nueva inquilina, la joven fallecida, no ha tenido ningún problema de convivencia en el bloque. No ocurrió siempre lo mismo, ya que según testimonios recogidos por Ical, la misma vivienda fue ocupada con anterioridad por otros ciudadanos rumanos que habrían desvalijado antes de abandonar el piso, donde al parecer se ejercía la prostitución.
