El domingo 21 de junio ya se puede viajar por toda España al decaer el estado de alarma
El domingo 21 de junio de 2020 es el día: se podrá viajar sin restricción general alguna por toda España una vez superadas todas las fases del estado de alarma que provocó la pandemia mundial de coronavirus en el país. Desde las 00.00 horas de esa fecha, domingo 21 de junio, la movilidad será total en todo el territorio español con carácter general, tal y como lo confirmó hace días el propio ministro de Sanidad, Salvador Illa.
Toda España, incluso al margen de la fase de la desescalada en la que se encuentren las distintas regiones y provincias, entrará en lo que el Gobierno ha dado en llamar la 'nueva normalidad'.
La fecha de 'libertad' de movimientos, que hasta ahora impedía en Castilla y León abandonar las fronteras provinciales incluso dentro de una misma Comunidad que tenía cinco provincias en fase 3 (León entre ellas) y otras cuatro aún en fase 2, viene marcada por la literalidad del Real Decreto 555/2020, de 5 de junio.
Ese Real Decreto recogía que la última prórroga del estado de alarma establecida “se extenderá desde las 00.00 del día 7 de junio de 2020 hasta las 00.00 del día 21 de junio de 2020”. O lo que es lo mismo, certifica que en la misma madrugada del sábado al domingo ya se podrá viajar con todas las de la ley.
Ojo a las obligaciones de protección
Pero para que nadie se llame a engaño, eso no significa ni que el coronavirus no siga estando entre nosotros ni que deje de haber obligaciones y exigencias de seguridad personal y colectiva. De hecho, se mantendrán una serie de obligaciones y requisitos que marcarán la convivencia, porque tal y como ha explicado el ministro Illa en numerosas ocasiones la prioridad es minimizar la posibilidad de nuevos rebrotes de la Covid-19 al relajarse de las nuevas costumbres adquiridas durante los meses de confinamiento y restricciones. Hasta que no haya vacuna, la 'nueva normalidad' ha llegado para quedarse.
Las restricciones y obligaciones vienen marcadas de manera oficial en Boletín Oficial del Estado (BOE) publicado el miércoles 10 de junio, que recogía el real decreto ley con todas las medidas para hacer frente a la pandemia tras la finalización del estado de alarma, el cual decae oficialmente el 22 de junio.
Cómo viajar en el propio coche
En virtud de este real decreto ley, será obligatorio seguir manteniendo la distancia social y llevar mascarilla, bajo pena de multas de hasta 100 euros. Por eso mismo, por supuesto si se va en transporte público pero también si se va a viajar en el coche particular entre provincias y comunidades desde el domingo 21 de junio hay que recordar que no hará falta mascarilla ni otra protección siempre que se haga o solo o en compañía de por personas con las que se ha convivido en todo este tiempo. En tal caso, se pueden ocupar todos los asientos del coche.
Sin embargo, en caso contrario, es decir, que viajen personas que no hayan convivido, el uso de la mascarilla seguirá siendo obligatorio y sólo podrán viajar dos personas por fila para intentar distanciarse todo lo posible.
A partir del fin del estado de alarma este fin de semana, pasará a ser plena competencia de las comunidades autónomas la posibilidad de “restringir algunas actividades”, como por ejemplo en materia de salud pública o de educación, entre otras, explicó el ministro Salvador Illa. Es decir, “no podrá haber una limitación generalizada” de todos los ciudadanos, matizó, pero sí que en este caso la Junta de Castilla y León podrá “hacer restricciones mucho más quirúrgicas, de personas concretas, unidades familiares, de unidades sociales mucho más restringidas, y siempre con autorización judicial”.
El precedente de Miranda de Ebro
La máxima capacidad de la Comunidad autónoma de restringir de algún modo la movilidad en caso de rebrote será aplicar Ley de Medidas Especiales en Materia de Salud Pública, aprobada en 1986. Fue la misma que, de manera previa al estado de alarma del 14 de marzo, se esgrimió cuando en febrero dos centenares de turistas tuvieron que ser confinados en un hotel de Tenerife tras haberse detectado el primero caso positivo en un ciudadano alemán. Medida que, por cierto, resultó muy efectiva.
Igualmente se hizo en Castilla y León con un foco que preocupó antes que ninguno en la localidad burgalesa de Miranda de Ebro, donde se impusieron restricciones más duras y antes que en el resto, como anular las clases de todo tipo de centros educativos, consultas médicas, visitantes y acompañantes a centros sanitarios y residencias de mayores y toda actividad en centros cívicos, deportivos, gimnasios, academias, bibliotecas, albergues juveniles, ludotecas y espectáculos públicos.
“No la acordonamos pero sí establecimos limitaciones que hicieron que la localidad se mantuviera de manera estable. Eso lo permite la Ley de Salud Pública», explicaba ayer mismo la consejera de Sanidad, Verónica Casado.
La Junta de Castilla y León insiste en que su decisión de tomar como referencia las zonas básicas de salud, y no las provincias, ayudará a este proceso si vienen mal dadas, porque llegado el caso se podría 'acordonar' una zona básica sin necesidad de afectar a todo un territorio más amplio.
Eso sí, tomen la decisión que tomen, las autonomías siempre deben respetar e imponer las condiciones del real decreto que marca la 'nueva normalidad', contando con la coordinación del propio Ministerio cuando así lo reclamen.
Europa sin (casi) límites
Sólo en el peor escenario posible, que es que los rebrotes se descontrolen de manera generalizada y vuelvan a amenazar de manera masiva, el Gobierno no descarta volver a usar el recurso del estado de alarma.
Mientras, además de la libertad de viajar desde el domingo 21, también en esta misma jornada se levantarán los controles de las fronteras de la Unión Europea en todo el espacio Schengen, excepto la reapertura de fronteras con Portugal, que a petición del país vecino será el próximo 1 de julio.
