La Diputación aprueba un presupuesto de la misma cuantía que hace una década
El Pleno celebrado hoy en la Diputación para aprobar el presupuesto del año que viene evidenció en su cuantía general el varapalo que a las cuentas públicas del Palacio de los Guzmanes la burbuja y posterior crisis de la última década, dado que los 135,4 millones de euros de ingresos y gastos son casi la misma cantidad que hace diez años.
Esa fue la cifra general aprobada con los votos del equipo de Gobierno del PP, el férreo apoyo del ex presidente Marcos Martínez Barazón, imputado judicialmente en la trama corrupta destapada por la Operación Púnica, y finalmente y con relativa sorpresa el voto faborable de los otros dos diputados no adscritos encabezados por Matías Llorente, algo que sólo desveló al final de la sesión.
PP y Martínez Barazón coincidieron en que se trata de un presupuesto “realista, social, generador de empleo y dinamizador de la economía provincial”, como los resumió el portavoz popular Jaime González. El cual aplaudió los más de 18 millones de euros de inversión, básicamente de proyectos de obras en los pueblos y en las carreteras de la red provincial, admitiendo que a pagar las deudas de los bancos se destinarán 21,3 millones. Por su parte, el presidente Emilio Orejas defendió que “son los mejores que podemos aprobar para nuestros pueblos porque aseguran los ejes fundamentales”, como los planes de obras y los de empleo y emprendedores.
Llorente: Presupuesto continuista, voto continuista
Por su parte, Llorente justificó que precisamente al ser una cuenta continuista hace que mantengan el apoyo al presupuesto que ya protagonizó el año pasado -cusando también votaron a favor PSOE y UPL-, a pesar de criticar algunas partidas puntuales, un escaso plan de carreteras, poca inversión en los municipios y pedanías y lanzar algunas propuestas que sin embargo el PP no terminó de recoger, más allá del “compromiso” del presidente Emilio Orejas a promover que las empresas leonesas concurran con ventaja legal frente a empresas de fuera a los contratos de obras de la institución.
Fue la mayor cuantía del pago de créditos a los bancos que el de inversiones el principal motivo de crítica de los demás grupos de oposición. El PSOE defendió que los presupuestos “de corta y pega” son “negativos para esta provincia” porque buscan “el beneficio de los bancos en detrimento del desarrollo de los pueblos” y en el que, además, “la Junta se va de rositas”.
Los “tontos” del PP que “no tienen huevos”
La postura más fustigadora fue la del único diputado de UPL, Lázaro García Bayón, que puso el acento principal en los 18 ó 19 millones que aún paga la Diputación de servicios, sobre todo sociales, que son competencia de la Junta y de los que “tenemos que pagar los platos rotos”. “Los tontos son ustedes que son del PP y no tienen huevos para exigir más a la Junta”, espetó como resumen.
Al final, el resultado quedó en 17 votos a favor -todo el equipo de Gobierno del PP junto a Marcos Martínez, Matías Llorente y Cristina López- y siete en contra, teniendo en cuenta los seis del PSOE con la ausencia de Eugenia Gancedo y el voto leonesista de García Bayón.
