El consumo de alcohol entre jóvenes aumenta en la crisis
Proyecto Hombre cierra el año 2014 con 1.031 usuarios atendidos en sus diferentes programas, según destacó su presidente en León y Bierzo, Jorge Peña, que destacó que en la actualidad son más las personas que acuden a la atención ambulatoria que a la residencial. Así, mostró también su preocupación por otra tendencia que refleja el incremento “en la atención a gente más joven con consumo no crónico, relacionado con el alcohol”.
Esa son las tendencias que han marcado su actividad a lo largo de este año. “Incremento de los usuarios más jóvenes, que presentan consumos de alcohol ligados a otras sustancias, algo que tiene que ver con el ocio y el tiempo libre”, señaló Peña, que compareció acompañado por secretario general de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades y comisionado para la Droga, Eduardo Cabanillas, y la consejera de Bienestar Social de Ponferrada, Isabel Báilez.
Peña destacó su preocupación porque el alcohol era una puerta de entrada a otros consumos para los jóvenes y que es una “droga legal” que es un factor común en los policonsumos, al tiempo que no es percibida como un riesgo por parte de los “chicos”, solo un 40 por ciento, frente al 90 por ciento que si ve como peligrosos el tabaco.
El presidente de Proyecto Hombre también destacó que la demanda actual de programas está bastante equilibrada entre el Bierzo y León, cuando tradicionalmente siempre había una actividad más intensa en la comarca berciana. Asimismo apuntó a que cada vez hay más usuarios con causas judiciales que obligan a la organización a intensificar la coordinación con los servicios judiciales y penales.
Peña también destacó los avances hecho para la reinserción laboral de sus usuario con la creación de una sociedad propia que permite ese primer contacto con el mundo del trabajo, tutelado durante seis meses, y a través del cual este año 45 personas han encontrado un empleo. En esta línea, recordó también los programas que realizan con presos y también en la lucha contra la violencia doméstica con la iniciativa 'Trébol'.
“Tenemos que seguir trabajando en la reinserción”, recalcó Jorge Peña. Un aspecto que también destacó el comisionado para la Droga en Castilla y León, Eduardo Cabanillas, que señaló que los datos de la privincia de León siguen la tendencia general de la Comunidad Autónoma y España con una estabilización en el consumo de drogas ilegales como la cocaína, el éxtasis o la heroína y un aumento en drogas legales como el alcohol y otras prohibidas como el cannabis.
En este sentido, destacó los esfuerzos hechos desde la Junta en prevención, con una atención especial a la edad “crítica”, en el rango entre los diez y los 16 años. Así, más de 17.500 jóvenes de Castilla y León participan en esos programas preventivos, al tiempo que se trabaja con unas 2.500 familias y se ha puesto en marcha una nueva iniciativa este años sobre “prevención entre iguales” que es un programa específico de prevención entre jóvenes u cuya previsión es duplicar el próximo año a sus participantes.
Cabanillas se mostró también muy preocupado por el consumo del alcohol, en el que los jóvenes se inician a una edad muy temprana, entre los 13 y 14 años, y también a un mayor número de “enganchados” a las nuevas tecnologías -llamado 'abusos TIC-. En este sentido, destacó la colaboración del Gobierno autonómico con ayuntamientos como el de Ponferrada que, a través de su Plan Municipal de Drogas, también combate estas adicciones, con la prevención como elemento más importante.