Los Campamentos del Coto Escolar ayudan a conciliar a 1.400 familias en las vacaciones escolares
Las instalaciones del Coto Escolar de León cuentan en esta temporada con 1.375 niños matriculados en los diferentes turnos de los Campamentos de Verano, con todas las plazas agotadas, según señalaron hoy fuentes municipale que recordaron que esta actividad ayuda a conciliar a cerca de 1.400 familias en plena época de vacaciones escolares.
El primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de León, Fernando Salguero, visitó hoy las instalaciones del Coto Escolar, junto a su directora, Teresa Santamarta, quien explicó que las estancias en el Coto Escolar son de distintas modalidades. Así, el albergue acoge a niños en horario diurno (de 10 a 17 horas), un día completo de 24 horas, 48 horas o de lunes a viernes. En total, 825 niños pasarán este verano por el albergue, 4.807 durante todo el curso escolar 2015-16.
Por otro lado, 495 niños participan en las actividades del conocido como 'Pequecoto', que incluye a los más pequeños, con actividades desde las 07.45 horas, cuando se sirve el desayuno, hasta las 15.30 horas, cuando son recogidos por sus familias después de comer. Un horario que tiene en cuenta a los padres que trabajan durante esta época estival y de vacaciones escolares. A lo largo del curso, las diferentes actividades del Pequecoto (Navidad, Semana Santa, Carnaval y Verano, además de los turnos escolares) han recibido a 1.623 niños.
Los niños con necesidades especiales -autismo, Síndrome de Down, usuarios de la Asociación de Padres de Personas con Parálisis Cerebral y Encefalopatías Afines (Aspace)- también disfrutan de las actividades del Coto Escolar; en concreto este verano hay 55 pequeños repartidos en cinco turnos. Recientemente, el Coto Escolar también albergó actividades intergeneracionales de convivencia de los niños con cerca de 300 mayores que celebraron su día en estas instalaciones con bailes, deporte y una paella.
Los chavales que disfrutan de las instalaciones del Coto Escolar participan en todo tipo de actividades lúdicas y deportivas, además de aprender cómo es la convivencia tanto en los turnos diurnos como en las estancias semanales en el albergue. Los niños realizan actividades en la piscina (natación o kayak), el rocódromo, con caballos, de orientación, la llamada 'búsqueda del tesoro', juegos tradicionales, visitas al zoo o juegos por equipos. Además, se ocupan de su propia higiene, de organizar las comidas y de adecentar sus cabañas.