Acuerdo para un nuevo Plan del Carbón que no deja satisfecho a nadie
Sindicatos y Ministerio de Industria cerraron en la noche de este jueves noche un principio de acuerdo sobre el marco que regulará el sector del carbón hasta el año 2018. La patronal Carbunión también aceptó los planteamientos del Gobierno que rebajan las pretensiones de la parte social y que deja el nuevo plan del carbón en unos términos más restrictivos que los precedentes.
El acuerdo pone fin a 18 meses de lucha y movilización, con una situación del sector muy complicada, con empresas en liquidación y una realidad económica global que también condiciona los términos del pacto, según destacó Jesús Magadán, de CCOO. Para Marcos Martínez, de USO, es “el único acuerdo posible”. Ambos reconocen que en modo alguno puede hablarse de satisfacción.
La aceptación de las condiciones que marca el Ministerio deja un sabor “agridulce” y entienden que pueda haber quien piense que lo logrado es poco. A ellos mismos se lo parece pero, recalcan, es “el mejor posible en las circunstancias actuales”. La complacencia no cabe porque, por ejemplo, no se ha logrado la llegada progresiva a los 54 años como edad de prejubilación y se implantará de inmediato (con una cotización mínima de 11 años en el régimen especial de la minería del carbón, frente a los ocho establecidos en el plan anterior). Una medida que, aseguran los sindicatos, no beneficiará a ningún trabajador a corto plazo.
Además, la indemnización para las bajas que se produzcan en el sector –cuya cifra es casi imposible calcular ahora- se queda en 10.000 euros fijos –los sindicatos pedían 12.500- y 35 días por año cotizado con un máximo de 30 mensuales. Para las bajas quedará establecido el cobro del 70 por ciento del salario bruto, siempre que no sea superior a la base máxima de cotización por accidente ni inferior al 60 por ciento de la base normalizada de la categoría que tenga el trabajador.
El acuerdo también contempla que las ayudas a las empresas por la producción de carbón de interior quede en 30 euros por tonelada con una reducción progresiva hasta los cinco euros en el último año de aplicación de plan. Las partes volverán a reunirse la próxima semana para intentar cerrar un acuerdo que se pretende presentar a Europa lo antes posible para acelerar su entrada en vigor.
