La Junta envía a Bruselas los programas por los que gestionará 413 millones hasta 2020

Ical

La Junta de Castilla y León aprobó hoy, en su reunión ordinaria del Consejo de Gobierno, los proyectos de los dos programas operativos regionales que permitirán gestionar 413,1 millones de euros que llegarán a la Comunidad procedentes de los Fondos Estructurales europeos FEDER y FSE para el periodo 2014-2020, si bien en los próximos siete años se recibirán 8.550 millones del conjunto de ayudas europeas.

Con su envio a la Comisión Europea, cuyo plazo termina el 22 de julio, se culmina la primera fase de su tramitación administrativa, aunque ahora se abrirá un proceso de diálogo con Bruselas antes de su aprobación, que se debe producir en seis meses, en enero de 2015, explicó el consejero de la Presidencia y portavoz, José Antonio de Santiago-Juárez, en la rueda de prensa posterior a la sesión semanal del Gabinete.

De Santiago-Juárez recordó que Castilla y León tiene asignados 1.011 millones de euros de los Fondos Estructurales de la UE para el periodo 2014-2020, de los que la Junta gestionará 455 millones, de ellos, el 91 por ciento, 413,1 millones de euros, se ejecutará a través de los dos Programas regionales, aprobados hoy.

En concreto, el Programa Operativo FEDER de Castilla y León contará con 314,4 millones de ese tipo de ayudas europeas, mientras que el Programa Operativo FSE de Castilla y León recibirá 98,7 millones de euros del fondo que le da nombre, ambos cofinanciados por el Gobierno autonómico, lo que eleva el montante global que se invertirá en la Comunidad a través de ellos hasta los 826,2 millones.

El Programa Operativo FEDER de Castilla y León 2014-2020 tiene seis prioridades, entre ellas, la más destacada, según la Junta, es el I+D+i con 91,9 millones de euros del presupuesto del PO. Para la mejora de la competitividad de las pymes, 88,9 millones; proteger el medio ambiente y promover la eficiencia de los recursos, 77,2 millones de euros; favorecer el paso a una economía baja en carbono en todos los sectores, 29,6 millones, y mejorar el uso y calidad de las TIC y el acceso a las mismas, 24,7 millones de euros.

En cuanto al Programa Operativo FSE de Castilla y León 2014-2020, pretende promover el empleo sostenible y de calidad y favorecer la movilidad laboral, para lo que contempla un conjunto de iniciativas que absorben 51,8 millones de euros de la dotación económica del mismo. Además, está destinado a impulsar la inclusión social y luchar contra la pobreza y la discriminación, marco al que se dedican 26,7 millones. También, se completa con el objetivo de invertir en la educación, el desarrollo de las capacidades y el aprendizaje permanente, con 18,6 millones de euros.

El consejero portavoz explicó que ambos proyectos han estado abiertos a las sugerencias de todos los ciudadanos y organizaciones interesadas hasta el pasado lunes en el portal de Gobierno Abierto de la Junta en Internet (www.jcyl.es). Por esa vía, han llegado 40 aportaciones de 17 organizaciones distintas, junto a las recibidas por la Dirección General de Presupuestos y Estadística a través de otros canales de comunicación, que se han incorporado como anexo a la documentación que se remitirá a la Comisión Europea.

Según la información facilitada por la Junta, “gran parte” de las mismas se han contemplado por entender que proponian mejoras en los textos para dotarles de mayor exhaustividad. En cuanto a su procedencia, el grueso de las sugerencias fue efectuado por gestores de fondos europeos, si bien también participaron otro tipo de entes como ONG y fundaciones de carácter social.

Por otro lado, la Junta recuerda que los programas operativos (PO) son herramientas de planificación que establecen cómo y dónde se invierten los dos fondos de la Política de Cohesión europea o Fondos Estructurales, que son el FEDER (Fondo Europeo de Desarrollo Regional) y el FSE (Fondo Social Europeo). Cuando los PO tienen carácter regional, su elaboración es competencia de las autonomías, explica el Ejecutivo.

De ahí que la Junta haya confeccionado dos propuestas, una por cada tipo de ayuda europea, que están orientadas a potenciar la I+D+i, la competitividad de las pymes, el empleo de calidad y las TIC en la Comunidad, y que es obligatorio remitir a Bruselas antes del próximo martes. A partir de ese momento se abrirá un proceso de diálogo con la Comisión Europea, que dispone de seis meses –hasta el 22 de enero de 2015– para proceder a la aprobación definitiva.

Líneas para su diseño

De esta manera, la Consejería de Hacienda ha diseñado los documentos base de los dos PO conforne a las directrices que marca el Acuerdo de Asociación presentado por España a la Comisión Europea el 22 de abril de este año. Además los programas operativos se han acomodado a tres variables: los objetivos de la Estrategia UE-2020, que se centran en lograr un crecimiento inteligente, sostenible e integrador; las metas específicas que marca cada uno de los fondos financiadores y, para finalizar, el impulso a la innovación como factor determinante de la competitividad, en línea con la recién aprobada Estrategia Regional de Investigación e Innovación para una Especialización Inteligente de Castilla y León 2014-2020, más conocida como RIS3.

Según la Junta, el inicio de cada nuevo marco europeo de programación es decisivo para todas las administraciones implicadas en la ejecución de los recursos que llegan de la UE, dado que es el momento en el que se detallan las partidas destinadas a cada territorio. Entre los datos relativos a Castilla y León que ya se conocen figura que entre 2014 y 2020 la Comunidad ingresará 1.980 millones de euros de ayudas europeas estructurales y de inversión, de los que 969 corresponden al Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER) y 1.011,1 a la Política de Cohesión.

Además, llegarán 35,8 millones de euros de la Iniciativa de Empleo Juvenil (YEI), cerca de 6.500 millones de la Política Agrícola Común (PAC) y una cuantía aún por determinar para la cooperación transfronteriza con Portugal (POCTEP), que se estima que podría alcanzar los 35 millones de euros, que eleva el montante de las ayudas que llegan de la UE a la Comunidad hasta los 8.550 en los próximos siete años.

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