Eduardo Madina: “Los militantes tendrán que decidir quién dirige el partido, pero espero que no se vuelvan a repetir la crisis de inestabilidad”
Pocas horas antes de que parte de su equipo presente en la sede del PSOE sus avales como candidato a la Secretaría General del PSOE, Eduardo Madina (Bilbao, 1976) charla con la Agencia Ical sobre sus propuestas y su intención de llevar al PSOE hacia un nuevo tiempo en el que no estará ya Alfredo Pérez Rubalcaba, de quien reconoce la “decisión coherente” de retirarse de la política. Confiesa que percibe “emoción” e “ilusión” por parte de los militantes con los que está reuniéndose en los últimos días, hoy en Salamanca, primero, y Valladolid, después.
¿Qué le parece el anuncio de Rubalcaba de dejar la política a la vuelta del verano?
Es una decisión coherente con el anuncio de convocar un Congreso Federal para su salida del partido. El PSOE está a las puertas de abrir un tiempo nuevo y él decide dar un paso atrás. Yo todo lo que que tengo es reconocimiento y respeto por su trabajo.
¿Es más complicado hacer esta carrera cuando uno sale con el cartel de favorito? En estos días ha salido una encuesta que habla de su ventaja respecto a otros candidatos... ¿Perjudica o beneficia contar en este nuevo proceso con el apoyo de federaciones y barones territoriales?
La verdad es que no siento el apoyo ni de federaciones, ni de barones territoriales, precisamente, sino más bien siento que estoy haciendo mi campaña, con los voluntarios, los equipos y con la gente que está en todos los territorios y no miro si es en clave de favorito o no favorito. Quiero dar un buen ejemplo y si sale bien tratar de hacer los procesos de cambio que el PSOE necesita para que los pueda después afrontar este país con un PSOE más fuerte. En eso pienso, no pienso en nada más, ni en encuestas, ni en otros candidatos, ni en nada más.
¿Qué ofrece Eduardo Madina frente a otros candidatos?
No me presento frente a nadie. Ofrezco un proceso de participación porque yo fui quien pidió el voto directo de los militantes. Ofrezco un proceso de renovación libre de hipotecas de viejos aparatos del partido y con una vocación de unidad plena y un proyecto político que sea el de transformación más importante del PSOE desde 1982. En eso voy a trabajar yo y para eso me presento.
¿Qué pulso está percibiendo de la gente?
Emoción e ilusión, creo que estamos viviendo un congreso histórico, la gente lo está sintiendo como propio porque es un proceso de congreso en el que se siente dueña porque puede participar de forma directa y todas mis sensaciones son de un partido que se ha emocionado con un congreso que es, sin duda, un congreso histórico.
¿Su apuesta implica ruptura con lo que se ha llamado vieja guardia socialista?
Mi apuesta es de futuro, de apertura en el sentido de un tiempo nuevo completo, pleno, de renovación de conceptos, de equipos, de propuestas, de conexiones sociales, políticas, sindicales, económicas, etcétera, para construir el mayor proceso de transformación que nunca el Partido Socialista ha hecho en España desde 1982. Por tanto, es una apertura de un tiempo nuevo.
No obstante, ¿cuánto de ruptura con las actuales prácticas representa Madina, toda vez que ha sido secretario del Grupo Parlamentario y, por lo tanto, responsable o corresponsable de la actual estrategia? ¿Qué tiene que decir al respecto?
Ha sido un periodo de aprendizaje en el que he aprendido el funcionamiento del parlamento, de la negociación política, de la palabra diálogo, de pasar momentos muy difíciles en el Congreso de los Diputados y eso me ha dado experiencia para saber afrontar el futuro sabiendo de lo que hablo.
Otra de tópicos: se le sitúa a usted más a la izquierda y a Pedro Sánchez en un ámbito más moderado, ¿responde a la realidad?
Yo sí soy de izquierdas y soy una persona socialista, de izquierdas, que está orgullosa de serlo y entiendo que para algunos en este país es casi un pecado mortal, pero me siento bastante orgulloso de ser socialista y ser una persona de izquierdas, no voy a pedir perdón por ello a nadie.
¿La salida para el PSOE está más por la izquierda que por el centro?
El PSOE ya es un partido de izquierdas, lo que tiene que presentar es un proyecto de modernización del país, que alcance amplias dosis de contenido social. No sé interpretar al PSOE si no es en clave de izquierdas.
No obstante, la irrupción de partidos como Podemos sí ha quitado votos tradicionalmente del PSOE. ¿Cómo puede volver a hacer atractivo el discurso para recuperar esos votos?
Necesitamos reconstruir alianzas sociales de todo tipo, tener confianza en nosotros mismos para que después la gente lo pueda tener en nosotros y necesitamos presentar un proyecto político de cambios profundos en el modelo de desarrollo de la economía, en nuestro modelo social y en nuestro modelo de libertades públicas, en nuestros derechos, obligaciones y libertades públicas, ir en serio con ello y ser creíbles en su defensa y en su propuesta y eso va a depender exclusivamente de nosotros, si decidimos ir en ese sentido o no va a ser una decisión que tome el propio PSOE, por tanto el futuro del PSOE depende exclusivamente de lo que el PSOE haga, no de nadie más.
¿Qué le diría a la gente que lo está pasando tan mal y a los muchos jóvenes que han tenido que salir fuera para que recuperen la confianza en su partido?
Que vamos a trabajar en la construcción de un proyecto de profundos pasos adelante en pro de la modernización de este país, que vamos a reorientar las prioridades del presupuesto del Estado, vamos a hacer de la lucha contra el desempleo juvenil una lucha central del proyecto político del PSOE, que nuestra apuesta es la educación de este país y la igualdad de oportunidades, las libertades y que vamos más en serio que nunca desde este congreso hasta las próximas elecciones generales. Con su ayuda este país lo podemos cambiar y no hay proceso de cambio político profundo que no pase en este país por el PSOE.
Si es Europa la que marca las directrices económicas y la socialdemocracia europea vota al candidato de derechas, ¿se puede decir que, salvando algunos matices, la medicina es similar? ¿Creen que ese voto a Juncker lo entenderán sus votantes?
Creo que el PSOE no debe votar a Juncker, debe presentar su propio modelo de desarrollo económico diferenciado de los otros modelos que hay en este contexto europeo nuestro, los que están más a nuestra izquierda y a los que están más a nuestra derecha. No creo que debamos formar parte de ese pacto y creo que ha llegado la hora de políticas de izquierdas para cambiar los márgenes de funcionamiento de la economía en Europa y eso, insisto, va a volver a depender de nosotros mismos.
Por tanto, ¿un partido dirigido por usted no votaría a Juncker?
No, yo no votaría a Juncker. Si fuera el secretario general del partido pediría a los eurodiputados que no formaran parte de ese pacto.
En cuanto al discurso territorial, es complicado explicar en Castilla y León, con sus problemas de población y demás que Cataluña es la perjudicada y que necesita un tratamiento fiscal distinto y más favorable... ¿Cómo encajar todas las piezas?
Yo hago mía una propuesta que el PSOE ha hecho de una reforma federal. Federalismo viene de una raíz etimológica que tiene significado de la palabra pacto, es acuerdo, es igualdad y es solidaridad. Se trata de conceptos base de una propuesta de reforma de la Constitución hacia el proceso federal de un país como España que es mejor para el conjunto de las partes y que ahora mismo es la única propuesta de salida que hay encima de la mesa en un escenario de tensiones territoriales serias como las que estamos viviendo.
¿Cree que los nacionalista aceptarán una reforma de la Constitución que no incluya la posibilidad de consultar la secesión de algunas comunidades?
Yo creo que no hay opción mejor que una propuesta de profundización en nuestra diversidad apuntalando la convivencia, mejorando las competencias, su financiación competencial, mecanismos de coordinación entre comunidades autónomas y un país que se sabe diverso, plural. Me parece una buena idea y un buen horizonte.
¿Sería posible una Constitución con menos apoyo que la actual?
Espero que no, que seamos capaces de abrir un proceso de diálogo potente en el Congreso de los Diputados, que haya un impulso hacia procesos de reforma federal de la Constitución y que las Cortes generales queden interpeladas para apostar por una mejora o actualización de nuestra Constitución a la realidad que es bastante distinta a la de 1978, que tiene más bien poco que ver con la España de hoy. Por tanto, aspiro a que si hay un proceso de reforma constitucional que toca los pilares centrales del Estado tenga un apoyo mayor que la que tuvo la Constitución del 78.
¿Se debe consultar a los españoles sobre Monarquía y República?
Mis prioridades tienen más que ver con que, por ejemplo, la educación y la sanidad estén protegidas constitucionalmente o con que incluya una reforma federal que articule el país para que, cada vez que gobierne la derecha, queden protegidas constitucionalmente. Esos avances son para mí las prioridades y, obviamente, un texto así reformado con esa profundidad es la vía referéndum la que le da validez.
¿Qué iniciativas se plantea para la regeneración de la clase política? Desde el PSCyL ayer se planteó en las Cortes limitación de mandatos, acabar con los aforados e implantar listas abiertas.
Las llevo planteando todo el recorrido en el Congreso. Limitación a dos mandatos, una persona, un único cargo orgánico e institucional y primarias abiertas para todos los partidos y espero que un gobierno socialista envíe pronto un proyecto de ley a la cámara para que los partidos en España elijan a sus candidatos en procesos de primarias abiertas, con limitación de mandatos y de responsabilidades.
El PSCyL atraviesa una crisis tras la ruptura de su ejecutiva. ¿Qué le parece la dimisión de más de la mitad de sus miembros por diferencias con Julio Villarrubia?
El PSOE en Castilla y León va hacia un escenario de congreso que tendrá que resolver y espero que lo haga en clave de futuro, dejando atrás las decisiones que le han llevado hasta aquí y que pueda construirse como una alternativa para un cambio de gobierno en Castilla y León ante un PP que lleva tanto tiempo, que se le nota cansado, sin ideas y que claramente este territorio necesita un cambio de gobierno.
¿Considera que, dada la división interna, Óscar López y Julio Villarrubia pueden competir de nuevo por la Secretaría Autonómica?
Eso lo decidirán los militantes del partido, que van a ir a un congreso de participación directa y que tendrán que decir quién es la persona que sale elegida. Lo que espero es que, a partir de ahí, no vuelvan a repetirse crisis de inestabilidad, como la vivida ahora y que el partido se una en Castilla y León para intentar un proceso de cambio al servicio de la gente que vive en Castilla y León.
En Castilla y León se le ha situado como el candidato de las personas que están con Julio Villarrubia, ¿le incomodan este tipo de etiquetas?
No, qué va. Tengo tan buena relación con Julio Villarrubia como con Soraya Rodríguez o con muchos nombres del partido, que no veo en clave de frentes, ni de nada. Me da igual las etiquetas que me pongan, me han puesto tantas en las últimas semanas que una más o menos no me importa. Mi afecto por mucha gente que trabaja en el PSOE de Castilla y León es enorme y siento que estamos ante una oportunidad que quiero compartir con ellos. Voy convencido a un congreso en clave de esperanza, ilusión de escucha, intentar hacerlo bien e intentar llevar al PSOE por sus mejores caminos hacia un mundo mejor.