León sigue en el vagón de cola de la recuperación económica y del empleo

dinero no crece en los árboles

Ical

Castilla y León experimentará un crecimiento de su Producto Interior Bruto (PIB) durante los años 2017 y 2018 del 2,8 por ciento, un periodo en el que se augura que podrían generarse en la Comunidad en torno a 40.000 empleos, reduciendo así la tasa de paro hasta el once por ciento a finales del próximo año. Así se desprende del informe 'Situación Castilla y León' elaborado por el Servicio de Estudios de BBVA y que hoy se ha presentado en León.

Este crecimiento se atribuyó fundamentalmente al dinamismo de la demanda interna de la Comunidad, algo que estuvo apoyado por el mantenimiento de los tipos de interés históricamente bajos, el aumento de la riqueza disponible de las familias y el precio del petróleo. Los datos disponibles en el inicio de este año apuntan a un mantenimiento del crecimiento, en concreto se estima que el PIB de la Comunidad habría aumentado en el primer trimestre de este año en un 0,7 por ciento.

El economista jefe para España de BBVA Research, Miguel Cardoso, explicó que pese a estos datos positivos, todavía se aprecian “ciertos desequilibrios” en lo que al crecimiento de empleo se refiere, porque se detecta un alto nivel de temporalidad y una tasa de paro del once por ciento a finales del próximo año sigue estando tres puntos porcentuales por encima de la alcanzada en 2008. “Hay espacio para reformas y medidas para impulsar la creación de empleo”, declaró Cardoso.

La mejora del empleo en el último año fue heterogénea en Castilla y León, de manera que Valladolid y Burgos, con los municipios de sus respectivas áreas urbanas, aglutinaron casi el 30 por ciento de la afiliación regional, mientras que el resto de capitales de provincia crecieron a un ritmo similar, del 2,2 por ciento, aunque con diferencia entre la Gran Área Urbana (GAU) de Palencia, con un cinco por ciento gracias al sector de la automoción, y de León, con un uno por ciento.

Aunque las previsiones para este año son positivas, se mantienen una serie de factores de riesgo, tanto externos como internos, que podrían limitar el alcance y la velocidad de la recuperación en Castilla y León. A nivel externo se mantienen las dudas en torno a las posibles medidas proteccionistas que puedan frenar la recuperación del comercio global, caso de la política comercial de Estados Unidos y la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

De cualquier forma, Cardoso apostilló que el Brexit no está teniendo “un impacto tan negativo” en Castilla y León, si bien no dejó a un lado la incertidumbre que genera este proceso pero que advierte que Castilla y León será una de las Comunidades menos afectadas, dada la menor exposición de su economía a la demanda británica. Sobre la inversión en la economía española y un posible aumento de los tipos de interés, Cardoso recordó que tanto el sector público como el privado de Castilla y León presentan un menor nivel de endeudamiento relativo respecto a otras Comunidades, por lo que el impacto de un eventual aumento de los tipos de interés también será menor.

El año pasado también continuó la recuperación del mercado inmobiliario en Castilla y León, en el que se aprecia una importante heterogeneidad geográfica. En este sentido, la menor relevancia del turismo, un mercado laboral menos dinámico, flujos migratorios menos favorables y una población envejecida justifican que el comportamiento del sector del ladrillo esté siendo menos dinámico que el del resto del conjunto nacional. En términos interanuales, las transacciones el año pasado del mercado inmobiliario mostraron un aumento del 11,9 por ciento en la Comunidad, algo por debajo del 13,9 por ciento de media en España.

Por provincias, la venta de viviendas residenciales creció en toda Castilla y León, con especial incidencia en Salamanca y Valladolid, con incrementos superiores al 20 por ciento. Por volumen de ventas, el año pasado Valladolid fue la provincia que registró un mayor número de transacciones, con casi 4.400 -el 21,3 por ciento de la Comunidad-, a la que siguieron Burgos, con un 16,9 por ciento, León con un 16,3 por ciento y Salamanca, con un 14 por ciento. Por el contrario, Segovia, Soria, Burgos y Ávila fueron las que menos aportaron al crecimiento de las ventas de la Comunidad.

Desde un punto de vista municipal, el precio de la vivienda el año pasado subió en solo dos de los 13 municipios de más de 25.000 habitantes de la Comunidad, y registró la mayor evolución en las ciudades de Zamora y Ávila, con un ascenso del precio de la vivienda del 0,8 y el 0,4 por ciento respectivamente. En contraposición, los mayores descensos se detectaron en Soria y Aranda de Duero, donde las caídas anuales fueron en torno al 8,2 por ciento.

Exportaciones

Las exportaciones reales de bienes en Castilla y León aumentaron el año pasado un 9,9 por ciento frente al 3,8 registrado en España, lo que constituye el cuarto año de incremento consecutivo. Esta evolución estuvo marcada por el sector del automóvil y las importantes inversiones que se anunciaron en esta rama hasta el año 2020, así como por el lanzamiento de nuevos modelos en los dos últimos años. Con la mayor actividad en las factorías de Palencia y Valladolid, el peso del sector del automóvil alcanzó el 48,6 por ciento de las exportaciones regionales de bienes, que fue el nivel máximo desde 2005 y un 13 por ciento por encima de los niveles de 2013.

De hecho, según el informe de BBVA, sin la aportación del 9,6 por ciento de este sector al crecimiento del año pasado, las exportaciones nominales de la Comunidad se habrían reducido en un 0,7 por ciento en 2016. por destinos, los bienes de Castilla y León siguen estando dirigidos de forma mayoritaria a Francia, con un 26,3 por ciento de los bienes, mientras que los seis siguientes destinos -Bélgica, Reino Unido, Italia, Alemania, Rumanía y Turquía- no alcanzan el diez por ciento de cuota. Los primeros datos disponibles para el primer trimestre de este año apuntan a tendencias “algo diferentes” respecto a las del año anterior y se prevé que las exportaciones reales de Castilla y León puedan estancarse como consecuencia de la parada en el crecimiento del sector del automóvil.

Sector turístico

El año pasado se registró un récord histórico en lo que a viajeros y pernoctaciones se refiere, ya que se superaron los 4,7 millones de turistas y los 7,8 millones de noches en la Comunidad, con crecimientos que en ambos casos rondan el 5,5 por ciento. Los turistas franceses fueron siendo el principal segmento de visitantes extranjeros mientras que los británicos supusieron la décima parte. Los primeros datos de este año indican que esta tendencia del turismo regional se mantiene en el primer trimestre, con un crecimiento del 1,2 por ciento de viajeros y del uno por ciento en pernoctaciones.

También los precios hoteleros registraron recuperándose el año pasado, un comportamiento similar al de otros destinos de interior, con una recuperación más moderada que la que se pudo observar a nivel nacional, pero todavía lejos de los niveles que se alcanzaron antes de la crisis económica. Sin embargo, los precios hoteleros de Castilla y León están teniendo un mejor comportamiento que en otras Comunidades como Castilla La Mancha, Extremadura o La Rioja.

Etiquetas
stats