El tesoro de Gaudí en Astorga desvela sus secretos en su restauración
El ecónomo de la diócesis de Astorga, Víctor Murias, ha sido el encargado de dar a conocer el estado de las obras del Palacio de Gaudí que supondrán “un antes y un después” del edificio ideado por el arquitecto catalán pero concluído en 1907 por Ricardo García Guereta. En la actualidad se está desarrollando la segunda fase, menos costosa económicamente de lo que será la tercera pero que supone el núcleo central del proyecto 'El Palacio Escondido', con el que el Obispado convertirá este recurso turístico en la única obra del arquitecto catalán que será visitado en su integridad.
En los próximos meses, se podrán visitar las estancias y dependencias de un edificio ideado para que vivieran y trabajaran en él el obispo y todos sus asistentes, desde los secretarios, el juez del tribunal eclesiástico y el personal de servicio, pero que nunca cumplió esa función. Readaptado para ser la sede del Museo de los Caminos, el Palacio ha mantenido ocultos elementos arquitectónicos que ahora están saliendo a la luz. Entre los más llamativos, se encuentran las bóvedas que impedía ver el falso techo de la vivienda de los guardeses.
En la parte que fue la casa de los guardeses existía una escalera de servicio que ha sido demolida con el fin de que en el hueco se instale el ascensor, con el cual el Palacio se convertirá en un edificio accesible para personas con dificultades para moverse.
Las escaleras helicoidales por las que los visitantes pueden acceder actualmente a las plantas superiores también están experimentando un cambio con la prolongación, mediante escalones de metal, hasta la parte del bajo cubierta que será visitable. Los turistas que se acerquen a conocer el Palacio Escondido podrán recorrer el 'desván' y observar el entramado de madera que soporta el tejado desde donde se pasará a lasterrazas que coronan el edificio.
En el bajo cubierta, obra en su totalidad del arquitecto Guereta, se han eliminado tuberías y depósitos de agua y se ha tratado la madera que en su día estuvo afectada por las termitas. La luz llega ahora a través de los hastiales recuperados que se encontraban tapiados.
La planta superior, hasta ahora dedicada a la pintura contemporánea, se transformará en una gran sala para eventos, conferencias y exposiciones temporales.
La segunda fase de la restauración del Palacio eliminará la grieta y los desconchones en la bóveda del Salón del Trono. La 'herida', consecuencia del repise de la estructura del edificio y cuya evolución preocupaba a los mantenedores de la obra arquitectónica, era sumamente sensible a las dilataciones por el calor y el frío e impedía el acceso al público a la parte más importante del edificio que será nuevamente visitable.
La tercera fase
Una vez concluya la segunda fase en el mes de abril, comenzará la tercera financiada por el Ministerio de Fomento y cuya inversión, ya consignada en los presupuestos generales del Estado, ascenderá a 1.835.526 euros. Víctor Murias ha explicado que las actuaciones que se llevarán a cabo se centrarán en la restauración de las fábricas pétreas y la carpintería de madera exterior e interior, así como las rejas, la puerta de hierro, las cubiertas de pizarra, los revestimientos, los paramentos, los torreones, la iluminación, el jardín y se construirán cuartos de aseo.
La restauración más destacada de la tercera fase corresponderá a las vidrieras de principios del siglo XX, estudiadas y documentadas por el ex director del Palacio, José Fernández Pérez. Los vitrales dedicados en su mayoría a la Virgen María, narran los diferentes momentos de la vida de la Madre de Jesús.
Como indica en su estudio José Fernández, “tenemos la suerte de conservar los cartones correspondientes a las escenas del primer cuerpo de vidrieras. Son pinturas sobre lienzo, enmarcadas en artísticos bastidores. Como ya se ha indicado, algunos de ellos llevan la firma de los hermanos Maumejeau y de Ricardo Guereta [sic]. Pero ¿quién fue el artista que realizó el trabajo de dibujar esos cartones? Su firma no la encontramos por ninguna parte. No existe, o no conocemos, documento alguno que aclare este punto. Parece ser que, según una información oral, se trataría, de un artista leonés casi desconocido, José Juan Cadenas”.
La reforma del Palacio comenzó en la primera fase en la que se ejecutó el arreglo de las terrazas con la recuperación de las losas y la eliminación de las humedades mediante la apertura de los canales de piedra originales que estaban obstruidos por los materiales añadidos en las sucesivas revisiones y obras.
Nueva musealización
La recuperación de los espacios escondidos y de los elementos dañados por el paso del tiempo obligarán a la dirección del Palacio a redactar un nuevo plan de musealización, en el que se rediseñarán las visitas. La nueva forma de disfrutar del edificio combinará el recorrido por los elementos arquitectónicos y la contemplación de las piezas artísticas y esculturas más destacadas de la diócesis, con lo que no perderá la esencia del Museo de los Caminos.
Incremento de visitas
Sin duda, la restauración del Palacio de Gaudí servirá para continuar incrementando las visitas al recurso turístico que imprime un sello distintivo y de calidad al turismo de Astorga. En 2015, el Museo de los Caminos experimentó un aumento de 20.000 visitantes respecto al 2014, pasando de las 61.593 a las 86.749. Según el ecónomo de la diócesis, este incremento se debe al trabajo de promoción de estos últimos años, un aspecto que debería redoblarse en próximas campañas turísticas ya que el Palacio es el atractivo más importante e internacional de la ciudad.
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