Trae tu huella dactilar a trabajar
El gobierno popular y cívico de Villaquilambre ha aprobado la instalación de un sistema de control de presencia en los edificios municipales pionero en la provincia y “necesario porque los ciudadanos tienen derecho a saber que las personas que cobran de sus impuestos cumplen con sus obligaciones como ellos tienen que cumplirlas”, señala la concejala de Personal, Milagros Gordaliza.
Actualmente, no se está realizando ningún control similar, dado que el vigente, a través de la tarjeta para fichar, no funciona. El sistema que se implantará en adelante sustituye el lector de tarjeta por uno de huella dactilar, de modo que no podrán producirse suplantaciones. Pero, sobre todo, “es un sistema informático unificado y centralizado”, destaca la concejala, que permitirá controlar la presencia y ausencias de cada trabajador, adaptándose a las obligaciones concretas de cada uno de ellos. Se instalarán lectores de huellas en la Casa Consistorial, donde trabajan 129 el edificio de la Policía Local, donde trabajan 15 personas y en la nave de obras y jardines, donde también habrá un control de proximidad para los 25 trabajadores que desarrollan allí su actividad.
El sistema es totalmente personalizado, de modo que se adaptará a las circunstancias de cada trabajador, en función de su calendario, las autorizaciones con las que cuente para ausentarse, las actividades especiales que requieran salir de su centro de trabajo habitual, etcétera. De este modo, también podrá contarse con informes personales sobre la presencia o ausencia de cada trabajador, el tiempo trabajado, las ausencias y los motivos que las justifican, etcétera. “Como ciudadanos –señala Milagros Gordaliza-, debemos ser exigentes, debemos reclamar una Administración eficaz, requerir la máxima implicación de sus empleados, y los políticos debemos hacernos responsables de ello”.
El Ayuntamiento de Villaquilambre cuenta en este momento con una plantilla de 169 trabajadores, de los cuales 69 son funcionarios, 91 son laborales fijos y 2 eventuales. El sistema de control de presencia costará cerca de 9.000 euros, “que los vecinos rentabilizarán, al permitirles tener una administración más eficiente”.