El Supremo agrava la guerra empresarial de los Álvarez Mezquiriz dos años después de su muerte

Carlos S. Campillo / ICAL Entrada de la empresa Neal S.A. en Sahelices de Sabero (León) de la que fue presidente del Consejo de Administración el empresario David Álvarez

Más de dos años después de la muerte de magnate leonés David Álvarez la batalla familiar por el control de las empresas sigue muy viva, entre las que se encuentran el Grupo Eulen, las bodegas Vega Sicilia o la cárnica leonesa Neal SA con la marca Valles del Esla. La última noticia es una victoria del empresario frente a sus cinco hijos 'díscolos', ganando en el Supremo una sentencia que anula otra que había servido a sus hijos para controlar la famosa empresa bodeguera.

El periódico económico La Información ha detallado este viernes la sentencia que anula otra que daba validez a un acuerdo de cambio de los estatutos y el poder político de la empresa Bodegas Vega Sicilia SA, con la que el magnate quedaba fuera del control al no llegar al 66,66% de derechos políticos de voto necesarios para cambiar los administradores. Una cifra que fue elevada por acuerdo de los hijos que disentían del poder del padre. El empresario y su hija heredera principal, María José Álvarez Mezquíriz, recurrieron la decisión pero la Audiencia de Valladolid rechazó emitir opinión por haberse hecho el recurso fuera de plazo.

El Supremo obliga ahora a la Audiencia de Valladolid a pronuciarse sobre el fondo del asunto, que podría provocor un cambio de poder en las famosas bodegas pucelanas. Las bodegas están controladas por los hijos díscolos a través de la sociedad El Enebro SA, que compró además las acciones que éstos tenían en la empresa Eulen, que controla gracias a ser la heredera principal su hermana María José Álvarez. La decisión final de la Audiencia de Valladolid podrá ser nuevamente recurrida pero podría cambiar la dirección de las históricas bodegas.

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