Desánimo, abstención y recortes en el país vecino
Portugal está hoy llamado a las urnas -de forma anticipada- para elegir primer ministro, pero la sensación de los ciudadanos es que su papeleta sirve en esta ocasión menos que nunca. El futuro está escrito antes del recuento con un guión diseñado desde fuera, e independientemente del partido político que se alce con el poder.
Ajustes, recorte, austeridad y tiempos bajos para la economía lusa será lo que venga tras los comicios. A nuestro vecino no le queda más remedio que aceptar la intervención para recibir la ayuda necesaria de 80.000 millones de euros de tres instituciones, Unión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario -la llamada troika-, destinados a reflotar su economía.
“Va a haber una abstención bastante elevada debido a la situación en la que se encuentra el país, en medio de un rescate y con un descontento generalizado”, analiza para ileon.com el cónsul de Portugal en León, Eduardo Matías Díaz.
“El Partido Social Demócrata (PSD), de Pedro Passos Coelho, tiene ventaja y las encuestas apuntan a que ganará por mayoría simple, por lo que es posible que forme un equipo de gobierno en coalición con el partido de derecha”, Centro Democrático Social (CCDS-PP), la tercera fuerza política del país.
De cumplirse las estadísticas, José Socrates, del Partido Socialista, que presentó su dimisión en marzo tras haber sido rechazado en el Parlamento sus medidas de ajuste económico, no volverá a ser elegido. Aun así, Sócrates ha mantenido el apoyo de buena parte de los portugueses que confiaban en su gestión. “Al principio tenía mayor respaldo porque el candidato del PSD (Pedro Passos) era nuevo y desconocido, por lo que tampoco se tenía mucha confianza en él”, explica Matías.
Para Matías los principales retos que se le presentan al nuevo primer ministro se resumen en uno: austeridad. “Va a haber que ajustar y reducir mucho los gastos, los ciudadanos son conscientes de ello, aunque creo que no se dieron cuenta de lo mal que estaba la situación hasta bastante tarde” y asegura que los sectores más afectados serán los de comercio e industria.
Para recibir el rescate de la troika, Portugal se compromete a reducir su actual décifict del 8,7% del PIB hasta el 3% en 2013. Cada tres meses tendrá visita puntual de sus tres benefactores para revisar que las medidas de ajustes se están cumpliendo.