Pánico ante las comidas de Navidad: todas las dudas sobre el test de antígenos
Una buena parte de los ciudadanos, también los leoneses, se debaten estos días entre celebrar estas fiestas navideñas en su casa o volver a reunirse con familiares al no haberlo podido hacer el pasado año a causa de la pandemia del coronavirus. El caso es que estas navidades la situación está mejor en el ámbito sanitario pero rompe récords en cuando al número de contagios, más leves por lo general, se refiere.
En los últimos tres días se han detectado más de 2.400 positivos en las casi 23.000 pruebas PCR realizadas, unas cifras nunca registradas en olas anteriores. Así, ante la psicosis por las reuniones familiares, surge el dilema de si hacerse o no un auto test de antígenos, motivo por el que las farmacias hace días que están desabastecidas. Algo que también ocurre en Asturias, como resalta Lavozdeasturias.es.
De este modo, lo primero si uno decide hacerse un test de antígenos, y no lo ha comprado con la suficiente antelación, es poder conseguirlo, algo que en los últimos días ha resultado harto complicado porque la mayoría de las farmacias de la región tenían agotadas las pruebas rápidas de detección de la covid.
La principal entrega de test de este tipo no se espera hasta la próxima semana porque en España son pocas las marcas que están autorizadas y tienen escasez ante la alta demanda. Ello conlleva que las distribuidoras encarezcan el precio a las farmacias. En algunos pocos casos, hace días se podía encontrar un test de este tipo a un medio de 3,50 euros, lo normal era a 5 euros pero hoy, si quedan unidades, hay algunas farmacias que los cobran a 12 euros, asegurando que a ellas ya les duplicaron o triplicaron el precio.
¿Cuándo hacer una prueba rápida?
Para quienes han decidido hacerse un test de antígenos antes de reunirse con familiares o amigos, los expertos explican que no tiene muchos sentido hacércelo con algunos días de antelación. De hecho, lo razonable y lo que se recomienza es realizarse el test poco antes de reunirse con otras personas en un lugar cerrado porque sólo entonces un resultado negativo significa que en ese momento no existe carga viral suficiente para dar positivo y, por tanto, teóricamente en ese momento no se podría contagiar.
Pero no sólo se están haciendo pruebas rápidas para la detección del virus SARS-CoV-2 quienes tienen pensado reunirse con gente estas fiestas. También están tirando de test de antígenos quienes tienen síntomas de infección por coronavirus o quienes sospechan que pueden ser positivos tras haber tenido un contacto estrecho con un contagiado.
Es decir, aquellas personas que ha estado al menos 15 minutos sin mascarilla y distancia de un caso positivo. Ahora, con el avance de la extremadamente contagiosa variante ómicron, el contagio puede darse mucho antes.
Los autotest están siendo una alternativa para saber cuanto antes si se es positivo ante la práctica anulación de pruebas, tanto de antígenos como incluso de PCR, provocando además una saturación de ciertos centros de salud, con el cierre además muchos consultorios rurales en la provincia de León.
Contradicciones
Y otro problema es que, con el retraso de días con el que se puede conseguir una primera cita con un médico de cabecera, de Atención Primaria, los sospechosos dudan de lo que deben hacer. Tampoco contactan los rastreadores para ayudar en dar indicaciones fiables. Es más, muchas veces la información es contradictoria, ya que algunos facultativos o rastreadores recomiendan mantener una estricta cuarentena incluso sólo si se ha sido contacto estrecho de un positivo y otros siguen un protocolo en el que se indica que si están vacunados no se cuarentenan, aunque sí restrinjan su vida social y extremen las medidas.
