El cartel de Navidad de León, un montaje que oculta los veladores irregulares permitidos en San Marcelo

A la izquierda, el cartel con la vista de San Marcelo sin veladores y con un gran árbol navideño, frente a la imagen real.

Una de las polémicas patrimoniales más comentadas en este año 2021 en la capital leonesa, o mejor dicho, su ausencia, es la imagen que curiosamente se ha elegido para encabezar la portada del programa y el cartel oficial de Navidad de este año en la ciudad.

Este programa, contratado a una conocida empresa y que ya se reparte para dar a conocer todas las actividades de las fiestas navideñas diseñadas por el Ayuntamiento de León, aparece con una imagen principal de la Plaza de San Marcelo. En ella se aprecia un montaje en el que destaca un gran árbol de Navidad iluminado que en realidad se corresponde con el año 2019.

Pero más llamativo aún: detrás se ve perfectamente, libre de cualquier obstáculo visual, la fachada del restaurante Marcela, es decir, el antiguo Palacio Hernando Villafañe.

Sin embargo, en realidad hace meses que esa fachada sí presenta un obstáculo visual cargado de polémica: unos veladores con estructura cerrada situados incluso sobre unas plataformas que elevan la altura del suelo original de la plaza de San Marcelo, todo ello ejecutado con el visto bueno municipal pero un expediente sancionador abierto por la Junta de Castilla y León.

Hay que recordar que Patrimonio de la Junta abrió este año ese expediente al comprobar que los grandes veladores instalados por este negocio en pleno centro patrimonial del casco histórico de León contravienen la protección que afecta al lugar, protección cultural del más alto valor posible ya que se trata de un Bien de Interés Cultural (BIC), en la categoría de Conjunto Histórico, Primer Itinerario Europeo y Patrimonio de la Humanidad, como es el Camino de Santiago.

La polémica instalación de una estructura que afecta de lleno al conjunto de la zona, además, se realizó hace meses incumpliendo la obligatoriedad de comunicarse a la Comisión de Patrimonio, que se enteró cuando ya estaba todo ejecutado tal y como permanece a día de hoy. Y es que el Ayuntamiento defiende la legalidad de los veladores, en cuanto que cumplen la obsoleta ordenanza de terrazas municipal, y entendiendo que el Camino de Santiago no le afecta; y por su parte, los dueños del negocio mantienen recurrido el expediente sancionador. Un expediente que ya no se tramita en León, donde se abrió, sino en Valladolid, en la propia Consejería de Cultura, mientras se siguen admitiendo clientes en su interior.

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