Bienvenidos al mundo de la sensualidad
Cuando Sheila abre su maleta roja, el mundo de la sensualidad toma forma. Pequeños objetos, suaves y sugerentes, fragancias, sensaciones... Todos los productos que ayuden a optimizar la calidad de la vida sexual de las parejas, y especialmente, mejoren la salud sexual de la mujer, tienen cabida en el equipaje de las asesoras de La Maleta Roja.
Vela de masaje Shunga, kit caricias, polvera bling bling, crema de virilidad del dragón, lubricante seda, mini vibradores con forma de pintalabios... son algunos de los más curiosos. Pero, hay para todos los gustos y necesidades.
La Maleta Roja, no es una franquicia. “Nació como una idea pensada para mujeres, nos parecía que estábamos muy olvidadas en este ámbito; el sexo, a veces, se convierte en un sector un poco sórdido, oscuro”, comenta Sheila, asesora de la empresa desde su nacimiento, hace cinco años.
“Se trata de un proyecto concebido para el género femenino que nace de la necesidad de educar sexualmente a la mujer”.
Además de asesorarla en temas de erotismo, esta empresa líder en educación sexual, “trata de mejorar su autoestima, sus relaciones íntimas y su calidad de vida”, explica la asesora, quien puntualiza que en los últimos tiempos también comienzan a participar en sus reuniones algunos hombres.
En León hay tres asesoras, de las casi 400 que cubren todo el territorio nacional. “Vamos expandiéndonos internacionalmente: dos asesoras en Andorra, 57 en Portugal, 25 en Italia y 17 en Uruguay”.
No son productos que necesitamos, nos complementan la vida sexual
Los productos que muestra y explica Sheila, no están solo destinados al placer. “Hay tres artículos que considero necesarios en la vida de una mujer: las bolas chinas, un producto específico para la menstruación que se llama 'Lunette' (una especia de copa de silicona muy suave que sustituye a los tampones) y los lubricantes”. “Están encaminados a mejorar la salud de la vagina, los demás son un complemento”, añade la experta.
El producto estrella... “Volaré, un estimulante que vale para hombre y para mujer, que mejora la sensibilidad y la calidad del orgasmo”, apunta. Y el más original... “El huevo es el que más llama la atención” (un objeto de material blando con un orificio en el centro que se utiliza para la masturbación masculina y que se guarda en un estuche con forma de huevo).
Tanga mariposa, polvera bling bling y crema virilidad del del dragón.
Cada mujer es un mundo que necesita cosas diferentes. “Somos asesoras pero también un poco sexólogas, sicólogas” apunta Sheila. “En este trabajo es muy importante escuchar e intentar averiguar, por lo que te cuentan las mujeres, qué problema puede haber, a veces incómodo para la vida en pareja o individual”.
Nada que ver con un sex-shop
En la actualidad, la marca se extiende hacia algunos negocios. “Tenemos un sistema de franquicias en tiendas que se llama 'Boutique sensual', que desarrolla la idea de la elegancia de la sensualidad y del erotismo, aplicado a una tienda”, explica Sheila. “No es un sex-shop, los productos están tratados desde otra óptica.
Cada uno de ellos tiene su expositor, su foco de luz, están tratados como si fueran una obra de arte“, apunta.
Para contactar con la maleta roja...
“Funcionamos con reuniones, generalmente en casas o lugares privados en los que durante dos o tres horas asesoramos a las mujeres sobre todos los productos que pueden ver o adquirir para mejorar su vida sexual”, declara la asesora leonesa. Además, “a partir del curso que viene vamos a hacer conferencias, charlas y cursos”.
“No son productos que necesitamos, nos complementan la vida sexual, igual que un bolso bonita, nos hacen la vida más fácil, más divertida, nos hacen sentir mejor”, puntualiza.
