Domingo de romería en el puerto de La Magdalena entre Omaña y Laciana
Murias de Paredes celebra este domingo 21 de julio, para provechar la jornada festiva, la romería de La Magdalena, cuya celebración religiosa corresponde al lunes 22. Una romería que se complementa con la muestra de artesanía que en este año alcanza su edición número diecisiete.
El Ayuntamiento de Murias de Paredes ha complementado estas actividades con la celebración el pasado jueves en la propia localidad de las jornadas culturales 'Memoria y Tradición', con la presencia y participación de Luis Mateo Díez y su hermano Fernando.
El puerto de La Magdalena (1.435 m) está situado sobre la carretera LE-493 como paso de separación entre las cuencas del Sil y del Omaña. Se encuentra a unos escasos tres kilómetros de la localidad de Murias de Paredes y ejerce de divisoria entre las comarcas de Omaña, al este, y Laciana, al oeste. Y todo pese a que dos pueblos del municipio de Murias se encuentran del lado oeste del puerto, Vivero y Los Bayos.
La romería y la muestra de artesanía local se celebran en la campa del puerto que rodea a la pequeña ermita consagrada a Nuestra Señora de la Magdalena, que en apariencia externa semeja más a una tradicional cabaña de montaña que un templo religioso.
Fue restaurada en 2022 por el Instituto Leonés de Cultura de la Diputación de León, con una inversión próxima a los 90.000 euros. “Con el paso del tiempo y el rigor del clima, la ermita ha ido perdiendo parte de sus elementos identificativos, tales como el campanario, los estribos y el tejado, de manera que en estos momentos se muestra como una construcción de piedra, de aristas redondeadas y con hierba en su cubierta, que la mimetiza con el entorno semejando desde fuera un chozo de pastores. Por el contrario, el interior supone un espacio de gran definición arquitectónica: un rectángulo cubierto por una potente bóveda de medio cañón, de lajas de piedra, dividido en dos por un arco fajón soportado por columnas apilastradas de sección recta. Solo presenta dos aberturas hacia el sur: la puerta, en la mitad occidental, y una ventana en saetera en el presbiterio. La fuerza de su mampostería y de su sillería caliza, le confieren un romántico aspecto de misteriosa gruta, pero en su interior pueden hallarse restos de las coloristas pinturas con las que estuvo adornada en su día. Mientras tanto, el suelo, muy rebajado y de barro, muestra la huella del agua que se filtra directamente por la bóveda”, explicaba el proyecto de restauración.
La romería
Después de la restauración el Ayuntamiento de Murias de Paredes decidió retomar la romería el pasado año, olvidada durante muchos años, trasladando a ella la muestra de artesanía y oficios tradicionales que habitualmente se celebraba en la localidad omañesa, capital del municipio del mismo nombre.
Buscando dar a conocer a las generaciones más jóvenes el valor del trabajo y los oficios de sus antepasados más próximos, padres y abuelos y con el con el objetivo adicional, “de fomentar el conocimiento de nuestro territorio y el apego al patrimonio y la cultura de esta comarca”.
No solo de oficios y trabajos vive el hombre, por eso se incluyen en las celebraciones la gastronomía y la música tradicionales, como alimentos necesarios para el cuerpo y el espíritu. Con una comida y actuaciones musicales con grupos de acordeonistas foráneos y locales, y la actuación del grupo Txaciana de bailes tradicionales
El cartel de anuncio de la romería reproduce la imagen última “que nos hizo el dibujante Lolo y por eso hemos querido rendirle este modesto homenaje, ya que siempre fue un imprescindible en nuestra feria”.
El paraje
Pese a que no tenga nada que ver con la celebración en si y los actos que se rememoran el entorno natural del paraje del puerto de La Magdalena invita a acercarse para disfrutar de sus apacibles praderías con el aliciente añadido, en estos días de ola de calor, de tener garantizada una temperatura muy agradable casi de rebeca o jersey, de entre 15 y 22 grados, según avanzan las previsiones meteorológicas.
Llegar al puerto desde el este, atravesando parte de la comarca de Omaña nos garantiza también recibir en la cara el fresco del aire refrigerado por el agua de los ríos y arroyos que discurren al lado de la carretera. Una suave subida desde Senra nos acercará hasta la ermita y la celebración. Sin necesidad de llevar mucho equipaje, pues hasta la sed se podrá saciar, ya que han dispuesto también servicio de bar durante toda la jornada.
Desde el lado este la subida es algo más abrupta, porque aquí también como sobre la cuenca del Luna en Babia, más al norte, el Sil vuelve a ser el río ladrón de aguas de sus vecinos. Con una captura fluvial de aguas sobre la cuenca del río Omaña. En este caso concreto le hace el encargo a su afluente el río del Puerto, que es quien hace el trabajo sucio y genera varias pequeñas cascadas de en el trayecto desde El Villar de Santiago hacia el puerto.
La llegada al puerto desde el lado este nos la anuncia sobre la derecha de la calzada una de las grandes miras de piedra, que antaño servían para orientar a los transeúntes y viajeros del trazado del camino en tiempos invernales y de nieve.
