El concejal de Comercio y Fiestas se enfrenta a una multa de 1.000 a 10.000 euros por las obras de KFC sin licencia
La empresa de la que es socio el concejal de Comercio, Consumo y Fiestas del Ayuntamiento de León, Pedro Llamas, y que ejecutó las obras paralizadas esta semana por el Ayuntamiento para abrir una franquicia de la conocida marca de comida rápida KFC por falta de todas las licencias municipales, se enfrenta a una sanción administrativa que oscilará entre los 1.000 en el caso más leve y los 10.000 euros si se establece la máxima gravedad.
El portavoz del equipo de Gobierno del PP, Fernando Salguero, defendió hoy tras la Junta de Gobierno municipal que en el caso del edil “se ha actuado como con cualquier otro”, recordando que fue el propio Ayuntamiento el que actuó de oficio -no por denuncia- para paralizar los trabajos realizados en las inmediaciones del centro comercial de Carrefour en León. El expediente de infracción urbanística abierto se resolverá “inmediatamente, posiblemente la semana que viene” y será tratado en todo momento “como si se tratara de cualquier otra persona o entidad”, defendió ante los periodistas. De este modo, al igual que ayer el alcalde de León, Antonio Silván, el portavoz popular obvió referirse a la posibilidad de asunción de responsabilidades de carácter político por este asunto.
La concesión definitiva de las licencias municipales obligatorias, que recordó que habían sido solicitadas e incluso abonadas en agosto, se otorgarán si así lo estiman los técnicos municipales cuando se haya pronunciado al respecto la Comisión Territorial de Patrimonio, que también debe valorar el proyecto por estar dentro del área de protección afectada por el Camino de Santiago. Algo que de momento no tiene fecha concreta.
