Cuando van a Sevilla los forasteros
“Llevan una tortilla de muchos huevos”, continuaba el dicho y lo tomo para así componer el epígrafe hoy elegido, derivado de una expresión que se empleaba con doble intencionalidad, durante conversación informal, con un trasfondo puntilloso.
La frase hecha, y utilizada según conveniencia, me ha servido para entrar en la materia que el fracaso cosechado en la liza por la Agencia Aeroespacial, ha supuesto para Legio, especialmente en esta ocasión, por aquello de la ubicación, aunque por supuesto no serían exclusivos los beneficios; algo sobre lo que debemos reflexionar, dado lo poco que pintamos en el panorama nacional.
Este último varapalo, a golpe de azote, nos viene dado primero por abulia política de los nuestros provistos de no sé qué magia para inducir a la insensatez a los votantes. Nosotros, ciegos de lo que sea, seguimos llevándolos al parlamento comunitario autonómico, en rocín bien provisto de alforjas, y al nacional, no peor jaezado.
Hay que decirlo, una vez más, es en el ente autonómico donde se nos está desubicando del panorama nacional y no digamos en el europeo donde León es un apéndice, sin propia personalidad, de una supuesta región española con ficticia unidad, que bien se encargan los parlamentarios autonómicos de Castilla y León de ocultar historia y vida leonesas. Para que León, la Región Leonesa, fracase siempre tienen opciones que nos resulten nefastas.
Diciendo esto, leído y puede que hasta aprobado por buena parte de los lectores, lo destemplador es que se pueda tomar como un “predícame cura, predícame fraile…”. Y no es una queja más, forma parte del lamento continuo de lo que nos daña y no sabemos cortar.
“Teruel existe”
Cuando hemos podido leer el planteamiento que se hicieron los de la agrupación electoral actuante defensivamente en política: “Teruel existe”, nos dimos cuenta de lo que nos falta a los leoneses, un vuelve tortillas de barro bien elaborado en Jiménez de Jamuz: Anticipación y criterio. ¡¡¡Y materia prima!!! Es bastante más que evidente que en Legio, de modo especial, cuando más los legionenses manejamos huevos de codorniz… para la tortilla política.
De los supuestos óvulos, la clara es ciudadana, porque como estamento la ciudadanía no se “aclara”. ¡Ah! Y la yema, y el meollo, se lo acoplan los políticos, en la versión más amarilla de lo anodino, y así ni con longeva cebolla (cada capa un año), ni sin ella, tienen las cosas leonesas remedio.
Se leyeron la convocatoria, en Teruel, como es deber y necesidad, (a ver si toman nota nuestros próceres) y encontraron fallos que les afectaban, por lo de la preferencia de nuevas implantaciones en la España vaciada, y en consonancia actuaron presentando un recurso bien fundamentado, lo que luego daría pie, a mayor abundamiento, a recurrir la decisión final, no por ser Sevilla, sí por lo que de intencionalidad distributiva y racional se omitía en el acuerdo al otorgárselo.
La actuación de la Junta
Nos queda el asunto Junta autonómica, que se involucraba en el asunto, dijeron, lo que no añadieron si era para “jorobar”, según método y rutina. Cualquier papel que intentemos mover en León, en la Región Leonesa, sin dilación lo hacen acompañar de otro movimiento paralelo para la facción castellana.
La Inteligencia Artificial, para la que se postulaba Salamanca, también quedó defraudada. No nos engañemos. Cómo se iba a volcar el ente autonómico en conseguir una o las dos para la Región Leonesa, si aquí quien ha de despuntar hoy y siempre es el centralismo en Valladolid, orgullo y prez comunitaria.
Atención leoneses, el señor Mañueco se cabrea, y mucho, dice, (*) y no se le ocurre otra cosa que echar la culpa a Sánchez, que tendrá alguna; y por supuesto la leonesa Amparo Valcárcel que lleva la Secretaría de Estado de Defensa, pero él, el factótum autonómico, experto en todo, no puso sobre la mesa, lo que tenía que poner; diversifica las opciones en esta Comunidad, cual reparto gratuito, acompañado de esfuerzo mínimo para los leoneses.
* Los nuestros le acompañan con gustoso grado. ¡¡¡Así nos va!!!
