Llegan a Laciana seis vagones de tren históricos que servirán para recuperar el Ponfeblino

Llegada de los vagones Limón Exprés que integrarán el Tren Turístico Ponfeblino.

Luis Álvarez / Redacción ILEÓN

Los seis vagones de pasajeros procedentes de la Comunidad Valenciana, que prestaron servicio en el FFCC Limón Exprés ya están en Villablino desde la tarde del martes 18 de noviembre y descargados esta mañana del miércoles para ponerlos a disposición de la empresa Ferrocarril del Valle del Sil, adjudicataria de la primera fase del proyecto por parte del Consorcio del Ponfeblino.

El Ponfeblino unió en 1919 Ponferrada y Villablino, construído en menos de un año. Durante setenta años transportó pasajeros entre ambas comarcas, además del carbón producido en la comarca lacianiega. En 1980 se cerró al tráfico de pasajeros, todavía con máquinas de vapor, y en el 2012 circularon los últimos trenes con carbón. En 1998 se celebró uno viaje promocional de pasajeros, el último que consta, para celebrar la inversión en el ferrocarril y como precursor de los trenes turísticos.

Las góndolas de transporte llegaron en la tarde del martes a Villablino y esta mañana, con dos grúas, fueron descargándolas y colocando los vagones sobre las vías para que una máquina, la Macosa 1004, los trasladase posteriormente a las inmediaciones de los talleres.

La operación de descarga, en una mañana fresa y desapacible mitad otoñal mitad invernal, fue presenciada por un grupo de curiosos, periodistas y fotógrafos, para dejar constancia de las instantáneas de esta importante jornada para el proyecto del Ponfeblino.

La pericia de los gruistas resultó sorprendente. Cada vagón era recogido por dos eslingas de cada una de las dos grúas que participaron en las operaciones de descarga, se elevaba sobre la góndola y se transportaba para posarlo sobre las vías.

Una operación casi milimétrica al posar las dieciséis ruedas de los ocho ejes de cada vagón con sus pestañas perfectamente sobre las vías, sin ningún percance en las seis maniobras realizadas.

El presidente del consorcio y alcalde de Villablino, Mario Rivas, calificó la jornada como “un día histórico, porque se vuelven a ver circular por las vías en Villablino vagones de viajeros, algo que yo personalmente no había visto nunca”.

Rivas recalcó que es un paso más “para cumplir los objetivos marcados” para que en junio del próximo año esta “primera fase del proyecto sea ya una realidad y comience a estar en marcha”. Las vías, la recuperación de las dos locomotoras y de los vagones, llegados hoy, “serán ya una garantía de continuidad y capacidad para este ambicioso proyecto”.

Rivas agradeció expresamente a la Generalitat Valenciana su “compromiso de cesión” con el consorcio, inicialmente por 10 años pero con previsión de extenderse hasta 30. El presidente del Consorcio confirmó el cumplimiento de los plazos establecidos, manteniendo junio de 2026 como fecha objetivo para el inicio del servicio. “Llevamos ya prácticamente ejecutada la mitad del trazado, aproximadamente unos 25 kilómetros que nos están acercando a Páramo”, detalló. Asimismo, anunció que las locomotoras diésel históricas están siendo adaptadas y se espera su llegada “a principios de febrero o finales de marzo”.

El trabajo para realizar en estos siete meses es arduo, puesto que los vagones recibidos están en un estado de deterioro notable; si no la totalidad de los mismos puedan estar disponibles en junio, al menos dos o tres sí lo estarán para poder inaugurar un ambicioso e ilusionante proyecto, no solo para Villablino, sino para la cuenca del Sil, desde Laciana hasta Ponferrada.

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