El Gobierno aún debe expropiar el 19% del terreno de la futura plataforma logística de Torneros en León

El Estado aún no es propietario de todos los terrenos que serán necesarios en los municipios de Onzonilla y Vega de Infanzones para albergar la futura plataforma logística intermodal de Torneros-Grulleros. De hecho, le falta aún el 19% de las casi 200 hectáreas totales, o lo que es lo mismo, aún no dispone a fecha de hoy de 375.000 metros cuadrados, en manos de particulares.

Es uno de los datos que destacan del proyecto de Plan Especial de la Plataforma de Torneros elaborado por la empresa de suelo público Sepes que se encargará de la ejecución de este polígono vital para el futuro de la economía leonesa y que permanece aún varias semanas disponible de consulta con el período de información pública abierto por la Junta de Castilla y León, pinchando aquí. Se trata del paso previo final, cuando obtenga el visto bueno autonómico tras años de espera, para poder comenzar a contratar las primeras obras de parcelas de cara a la instalación de las futuras empresas, quince años después de la primera promesa de ejecución en el año 2007.

En la documentación también se contemplan cifras importantes como que la inversión para la totalidad del desarrollo de Torneros, dividido en cuatro fases, ascenderá a 38,5 millones de euros, y se estima que se podría ejecutar como mínimo en 34 meses, es decir, casi dos años y ocho meses, si es que las cuatro fases se construyeran en continuidad temporal, lo cual sin embargo, no tiene por qué ocurrir.

Una a una, las cuatro fases

La primera de las fases sería con mucho la más costosa, alcanzando los 10,5 millones de euros sólo de ejecución material de las obras, entre otras cosas porque acometería el arranque de todas las infraestructuras básicas y planteamientos de urbanización, así como instalaciones imprescindibles para que las empresas comiencen a trabajar. Eso incluye una depuradora para evitar vertidos a los arroyos cercanos y finalmente al río que, en su conjunto, rondará los 2,5 millones pero sólo al principio ya requeriría cerca de un millón.

Esa primera fase duraría más tiempo también, 12 meses, un año completo, siendo las fases 2 y 3 de 8 meses estimados cada una con un coste respectivo de 7,4 y 5,5 millones de euros. La cuarta y última fase se cuantifica en 2,8 millones más y apenas suma seis meses de duración. El conjunto de estos costes, observando sólo la ejecución material de las obras, se eleva a 26,8 millones.

A mayores aparecen cifras como la mencionada para las expropiaciones aún restantes de 375.000 metros cuadrados, que se calculan en 741.000 euros a mayores. El grueso de esas expropiaciones lo serán de terrenos de Onzonilla (332.249 metros) y de Vega de Infanzones hay otros 42.606, según la documentación.

Llamativos desglosados

Otros costes llamativos a mayores de las obras en sí son la jardinería y el riego de lo que hoy es un auténtico 'secarral', con partidas de 136.703 y 125.000 euros cada una; la distribución de energía y alumbrado público básica y para esta fase 1, con casi 2,5 millones entre ambas; la redacción material de toda la documentación administrativa de planes, proyectos y obras, que suman 817.667 euros; los futuros costes de mantenerlo todo hasta que los dos ayuntamientos se hagan cargo del lugar una vez urbanizado (267.936 euros); o la instalación de pantallas acústicas por valor de 275.512 euros para evitar futuras molestias de este tipo cuando comiencen a trabajar las primeras empresas de transporte y logística e incluso durante la fase de las obras.

En este sentido, cabe destacar que los cientos de folios de toda la documentación que forma parte del proyecto de Plan Especial de la Plataforma de Torneros no mencionan en modo alguno las infraestructuras de intermodalidad, como algunas veces ha criticado políticamente la Junta de Castilla y León, por boca en concreto del consejero Juan Carlos Suárez-Quiñones de Medio Ambiente, departamento que debe tramitar precisamente esta última fase administrativa.

No se recoge por lo tanto mención alguna a la necesaria llegada del ferrocarril a Torneros, aunque lo cierto es que tampoco se habla de las conexiones viarias por carretera a la zona, dado que eso formará parte de otros proyectos de desarrollo de otros ministerios y empresas, como por ejemplo Adif. La empresa pública ferroviaria debería acometer el traslado a la futura plataforma de Torneros de los talleres de Renfe existentes en el barrio de La Sal León, tal y como como el director general de Sepes, Fidel Vázquez, comprometió en su última visita para presentar el proyecto final en octubre.

A principios de abril concluirá el plazo oficial abierto por la Junta, después de cuatro meses de trámites, para presentar cuantas alegaciones a este Plan Especial de la Plataforma de Torneros, y después a la Consejería de Medio Ambiente sólo le restará recopilarlas todas, junto a los informes de otras administraciones afectadas, para dar o no el visto bueno final y definitivo que permita al Sepes estatal sacar a contratación las obras.

El compromiso del Gobierno era poderlo hacer dentro de este año 2023, para lo que aseguró que había disposición presupuestaria suficiente, pero lo cierto es que en manos de la Junta se han acumulado muchos meses y está por ver si dará tiempo, sobre todo teniendo en cuenta los precedentes de embrollos administrativos entre Junta y entidades estatales, como CHD, que han sumado mucha demora en los últimos años.