“Una galería de arte no es un negocio, es más bien un mecenazgo”
La calle Juan Madrazo se convierte, de nuevo, en una de las vías custodias de arte en la capital leonesa. Ángel Cantero ha hecho resurgir de las cenizas la fragua de ideas e intercambio de experiencias de este lenguaje, el artístico, ya que la actual Galería de Arte Ángel Cantero fue la Galería Sardón, compuesta por dos socias, y de la que más adelante Carmen Díez asumió las riendas en solitario, e hizo de ella todo un referente en los años 80 y 90, según explica Cantero. “Sacaba artistas fuera, acudía a ferias internacionales de arte, e iba todos los años a Gante, en Bélgica”, comenta el artista.
Tras el paso de Carmen Díez, según recuerda Cantero, la galería pasó a otras manos, hasta que cerró en 2012. “Yo soy pintor y grabador y trabajaba con esta galería. Cuando me enteré de que se vendía, me lo plateé. No fue una decisión fácil, mucha gente considera que se puede prescindir del arte, y por consecuencia las galerías lo están pasando muy mal, están en su momento más delicado”, confiesa Cantero.
A pesar de la situación, Ángel Cantero se lanzó. “Me lancé por muchas cosas; ya estaba unido a esta galería porque era pintor, viví sus buenos momentos y me daba pena que ese trabajo se viniera abajo. Eres consciente de cómo las galerías van cayendo una a otra, la de Costa de Diego de Oviedo, otra en Santander donde yo trabajaba y otra más en Madrid. Ves como se desmorona el mundo de la cultura, el mundo de las galerías. Entonces yo me pregunté: '¿qué hago? ¿Me quedo como un ermitaño encerrado pintando o busco otras nuevas galerías que me muevan la obra?”. A la respuesta de esta pregunta vino una nueva vida para la galería de arte de la calle Juan Madrazo. “Me enteré de que se vendía y valoré los gastos de tener una galería abierta, que al mes son muchos, y que se vende poco, menos de lo que se tenía que vender para que esto fuese un negocio”, pero Cantero se atrevió.
“Para mí una galería de arte no es un negocio, es más bien un mecenazgo. Es un trabajo a largo plazo, algún día esto levantará cabeza y, si soy capaz de resistir, habrá merecido la pena el trabajo”, sentencia el pintor.
¿Cómo se trabaja en una galería de arte?
En una galería de arte se trabaja “mucho; no consiste en abrir y que se llene de gente. Hay que intentar conseguir nuevos coleccionistas, porque gran parte del mercado de arte se vende con las colecciones, no con las ventas esporádicas, aunque todo es bienvenido. Hoy en día mucha gente entra para hacer un regalo diferente, original... Todo es posible”, comenta el leonés.
Según Ángel Cantero, se trata de un mundo muy desconocido para mucha gente: “Hay personas que nunca han entrado en una galería de arte porque piensan que es como entrar en una joyería cara, que no van a encontrar nada por debajo de 3.000 euros. Pero sí tienen curiosidad, se asoman por la ventana; cuando llego por la tarde tengo que limpiar el cristal porque está lleno de manos y frentes”, explica el artista divertido. “Pero hay precios bajos, al alcance de muchos”.
En el desarrollo de su trabajo Ángel Cantero trata a partir de su obra y de sus contactos, mostrar la de otros artistas, cuyas exposiciones cambia una vez al mes. “También es difícil mantener a los coleccionistas, por el miedo psicológico que hay a una crisis que no se sabe cuándo va a terminar. Por el contario, conseguir nuevos artistas, es muy fácil. Hay muchísimos y muy buenos, es complicado decirle a alguien que no”, apunta Cantero, también dedicado a la enseñanza.
La Galería Ángel Cantero, ofrece una colección individual cada mes y dos colectivas, en julio y en diciembre. En agosto se cierra por vacaciones. El abanico de este espacio dedicado al arte da voz a todos los lenguajes artísticos, como realismo, abstracción, figuración y abstracción, y se abre a todas las tendencias: fotografía, pintura, escultura, grabado y video arte, entre otras. Tampoco entiende de fronteras: “Estoy dispuesto a exponer calidad, venga de donde venga. Algunos de los artistas que he tenido han sido Eugenio Caña, de Granada; Fernando de Dios, de Zamora; y Miguel Vallina, de Valladolid”, apunta.
La entrada a la Galería Ángel Cantero, que abrió sus puertas el 3 de mayo, es libre. En estos momentos se encuentra expuesta la obra de Agustín García, de origen burgalés. La meta de Ángel Cantero: “Abrí por pasión al arte, soy un romántico, no habrá negocio y soy consciente. Pero me he metido en algo que puedo asumir, que será un trabajo a largo plazo, que no dará frutos hoy, sino más tarde. Quiero que la galería consiga ser sostenible, que no sea una fundación, que haya mercado suficiente para que se pueda sostener y crecer. Me gustaría volver a hacer ferias de arte y promocionar a los artistas fuera de la galería, pero salir a las ferias cuesta dinero y los grifos de las subvenciones se han cerrado”, declara el pintor.
“No quiero hacer negocio del arte, quiero que crezca y sobreviva, y siga creciendo por sí solo. Mi idea no es enriquecerme con el arte, sino conseguir que cada vez sea más grande para promocionar muy bien a los artistas”.
La Galería de Arte Ángel Cantero se encuentra en la calle Juan Madrazo, 25, Bajo
