La claridad en el mensaje de las newsletters depende de un buen diseño
El e-mail marketing es muy importante para hacer llegar el mensaje de la empresa de forma directa a los clientes. Sirve para promocionar y vender, pero sobre todo, se trata de una herramienta de comunicación con nuestros clientes.
Mailrelay, cuya función principal es enviar mailing masivo, tiene la opción de darte de alta con una cuenta gratuita que cuenta con muchas ventajas. Una de ellas, es la posibilidad de mandar un total de 75.000 correos mensuales sin un límite diario, y la capacidad de gestionar hasta 15.000 contactos.
Por otro lado, para la comunicación con sus usuarios tiene un soporte por chat, ticket y teléfono, de forma gratuita. Además, destaca la ausencia de publicidad para utilizar cualquier herramienta de las que disponen.
Hoy en día, la presencia en Internet es fundamental para llegar al mayor número de usuarios posible. La efectividad del e-mail marketing para la visibilidad de la empresa es muy alta.
Es importante el contenido, pero también el diseño
Los usuarios cada vez están más acostumbrados a los e-mails y se han hecho “inmunes” a muchas de las técnicas que usan para promocionar sus marcas. No es fácil que un cliente hoy en día se impresione, y por ende, se interese por un producto nada más verlo.
El ingenio, la innovación y muchas características más, se han ido desarrollando a la par que Internet, en un mundo nuevo de posibilidades. Por eso, es importante saber cómo diseñar email publicitario, para conseguir el impacto que deseamos, porque lo primero que ven los clientes es la imagen que proyectamos, ¿es interesante nuestro anuncio?, ¿dan ganas de seguir leyendo?, ¿atrapamos al usuario? Puede que se trate de una tarea difícil de conseguir, pero no es imposible.
Claves para un buen diseño
En el momento de crear una newsletter para la lista de suscriptores que se pueda tener, es importante tener en cuenta una serie de aspectos relevantes en cuanto al diseño de la misma, además de insertar contenido de valor para los usuarios, con el fin de fidelizarlos.
- Primero de todo, deberíamos llevar cuidado con el tamaño de nuestras imágenes, porque una imagen de mucho tamaño, y por lo tanto de mucho peso, puede hacer que el cliente sufra dificultades para abrir el mensaje. Lo más probable es que el usuario se canse de intentarlo y termine por desistir.
- Como decíamos antes, el texto es muy importante, pero muchas veces, una imagen puede ser mucho más representativa que las palabras y más en un escenario visual como el de Internet. Encontrar imágenes que vayan acordes al texto que acompañan y que, además, generen un impacto en el cliente, puede ser decisivo para que éste siga leyendo.
- El texto debe ser claro y conciso. Con las palabras adecuadas debemos mostrar el mensaje que nuestra empresa quiere transmitir. Se debe cuidar todo, desde el título hasta la última línea, para que el cliente en ningún momento se aburra y que sienta la necesidad de seguir informándose sobre eso de lo que le hemos hablado.
- Hasta ahora, hemos hablado de lo importante que es lo visual, pero en ocasiones lo mejor que podemos hacer es mostrar un diseño simple. Esta técnica de diseño, beneficia sobre todo a la capacidad de cercanía, del punto de vista personal, las ideas, la humanidad y el mensaje. Pero entonces, ¿imágenes sí o no? Pues ambas opciones pueden ser buenas, todo depende de lo que queremos mostrar y cómo lo queramos hacer.
- En la propia newsletter podemos ofrecer formas de contactar con la empresa, lo que favorece la comunicación con la marca y da una mayor imagen de cercanía con el cliente. Éste podrá apreciar que no solamente estamos interesados en venderle a toda costa, sino que también nos interesa él, sus necesidades y opiniones, y que estamos dispuestos a ayudarle.
En definitiva, existen muchas formas de comunicarse a través del mailing, dependiendo de si queremos generar cercanía con el cliente o si sólo queremos transmitirle el mensaje. En ocasiones, lo que tratamos de exponer se puede representar claramente a través de una imagen, en este caso es muy útil su utilización. Sin embargo, a veces lo mejor que le podemos ofrecer, es un mensaje claro y directo.
Al cliente le puede interesar o no nuestra oferta, pero al menos, si no se queda con ella que no sea porque no la ha entendido o no le ha llegado correctamente.
