En casi tres meses desde que se presentó el borrador de la nueva ordenanza de terrazas de la ciudad de León, no exento de algunas polémicas iniciales por su contenido, la negociación del equipo de Gobierno en el Ayuntamiento con otros grupos políticos para sacarla adelante pese a no sumar mayoría suficiente, asociaciones de vecinos y de hosteleros ha provocado una serie de cambios que en algunos casos son sustanciales. Cambios que, con carácter general, parecen decantarse más hacia las exigencias de los vecinos, sobre todo tras las duras críticas de colectivos como en el Barrio Húmedo, muy saturado y conflictivo, pero que en algunos casos también van a beneficiar más a los empresarios de bares, cafeterías, pubs y restaurantes en la capital.
Lo que no cambia respecto al planteamiento inicial de la Concejalía de Comercio, Consumo y Fiestas es que definitivamente en León sí se quedarán para siempre las 'terrazas Covid', es decir, los veladores en zonas de aparcamiento, calles y carreteras de León, algo que sin embargo se tiende a erradicar en otras ciudades similares como Burgos, Salamanca, Oviedo, Valladolid e incluso mecas del turismo y la hostelería como Madrid o Segovia.
En estas terrazas lo que sí aparece en el nuevo borrador de ordenanza consultada por ILEÓN es que estas terrazas 'de carretera' sólo podrán suprimir uno de cada cinco aparcamientos situados enfrente del establecimiento de toda la zona centro, y no uno de cada tres como se proponía en un principio, mientras que en los barrios del resto de la ciudad se dejará que ocupen una de cada cuatro plazas.
Para compensar a los empresarios afectados, desaparece ahora la obligación de servir por parte de un camarero en mesa en estas terrazas, como antes sí se planteaba forzar, de tal manera que no atender en persona se planteaba incluso como motivo para retirar la licencia de terraza. Eso desaparece.
El caso de los 'mamotretos'
Otro detalle llamativo y nuevo es que la terraza “no impedirá u obstaculizará la visión de edificios emblemáticos históricos o singulares o elementos de de Patrimonio de la ciudad”. Esto es lo que lleva años ocurriendo con gran polémica en los veladores que el Ayuntamiento permitió a un conocido restaurante de la plaza de San Marcelo y que Patrimonio de la Junta sancionó por afectar a la protección del Camino de Santiago y precisamente 'tapar' varias vistas patrimoniales del centro. Sanción, sin embargo, que aún no ha forzado la retirada del popularmente llamado “mamotretos” porque los empresarios mantienen judicializado el caso.
También a favor de las peticiones vecinales aparece ahora en la ordenanza que se llevará a debate y aprobación política en el Consistorio que aquellos establecimientos que estén autorizados para temer música puesta en el interior y dispongan de terraza, tendrán que mantener en todo momento la puerta cerrada. Porque si bien están prohibidos con carácter general los amplificadores de sonido, éste podría salir con excesiva fuerza. La norma incorpora también un párrafo que antes no existía, como es atenerse a la Ley del Ruido de Castilla y León.
Respecto a los ruidos, en otro punto aparece como novedad que en las zonas catalogadas como acústicamente saturadas (zonas ZAS), “no se podrá autorizar incremento de superficie respecto al ya concedido, con el fin de que el novel de ruido no se vea incrementado”.
No será obligatorio un sonómetro
Pero también en esto el Ayuntamiento introduce una compensación a los empresarios, ya que desaparece la anterior obligación de instalar un sonómetro homologado en todas las terrazas de más de 24 metros cuadrados de superficie o cuando exista constancia de exceso de inmisión sonora en las viviendas cercanas.
Sobre otras molestias habitualmente denunciadas por los habitantes de León, como son el apilamiento, la recogida o instalación de mesas, sillas, veladores, toldos y sombrillas, el nuevo articulado de la ordenanza obliga a recoger todos los elementos cada día e introducirlos bien dentro del establecimiento o de un local alquilado al efecto, argumentando que “la superficie de la terraza no puede ser superior a la superficie del local”.
Sin embargo, habrá posibles excepciones si hay imposibilidad acreditada para cumplir“, de modo que el hostelero que sea autorizado, y siempre pagando la tasa de ocupación de vía que corresponda, podrá dejar el material almacenado cumpliendo criterios de seguridad y que ”no produzca afección significativa al uso común, a la accesibilidad, a la estética urbana“. En otros apartados, hasta se fija que no se moleste con el ruido de cadenas, e incluso se admite sancionar ”por el mal estado de tacos de goma en mesas y sillas, en aras a no producir niveles de ruido en la instalación, utilización o retirada“ de las terrazas”, detalles que también parecen nuevos ahora. No hacer bien las cosas en estos sentidos será objeto de falta leve, y antes no aparecían.
Más tramos horarios autorizados
E el apartado de horarios autorizados, hay un amplio cambio también, ya que de dos épocas diferenciadas (invierno y verano, este último desde Semana Santa al 30 de octubre) se pasa ahora a tres temporadas: la 1 iría del 16 de octubre al inicio de la Semana Santa; la temporada 2, entre Semana Santa y el 15 de junio, antes de las fiestas de San Juan y San Pedro; y la 3, entre el 16 de junio y el 15 de octubre, pasadas las fiestas de San Froilán y el Pilar. La diferencia entre estas dos últimas es que el horario máximo de terraza permitido es de las 1.30 horas de la madrugada en el segundo caso y hasta las 2.00 horas en el de pleno verano.
Por último, el régimen sancionador también trae cambios, algunos con más 'mano dura' a los excesos de terraza que algunos hosteleros de la ciudad aplican y la Policía Local venía multando de manera creciente, considerándose ahora falta grave que se aumente entre el 6 y el 10% del tamaño sobre el autorizado por el Ayuntamiento, aunque en el redactado inicial se consideraba sólo entre el 10y el 25% de exceso. Como grave también se añaden la ruidosa recogida o instalación de los veladores y como “muy grave”, el estadio superior, “incumplir las condiciones estéticas en terrazas ubicadas fuera de la zona marcada como de interés patrimonial”, o sea, en toda la ciudad.
Sanciones y sus efectos
Igualmente hay cambios en el efecto de la acumulación de sanciones, algo que algunos hosteleros venían haciendo con amplia impunidad, de modo que ahora se contempla que por la suma de dos sanciones “muy graves” se podrá retirar la licencia de terraza. Además, tres faltas leves en un período de dos años supondrán una grave, y tres graves en el mismo período se corresponderá con una muy grave. Eso sí, a cambio de esta mayor mano dura, por otro lado se contemplan ahora plazos por las que las infracciones de todo tipo puedan prescribir.
Por último, en cuanto a la ocupación que el Ayuntamiento leonés permitirá de plazas emblemáticas y de enorme tirón de terrazas, sobre todo del Casco Histórico, también se han introducido cambios. Se mantiene que con carácter general se pueda llegar a ocupar más de un 40% de la superficie peatonal que en la suma total tenga cada plaza, entendiendo como veladores una mesa con cuatro sillas, y se analiza caso por caso para garantizar que no se produzca una 'invasión'.
'Aligerada' la Plaza Mayor...
Y entre los cambios mayores, ahora se limita más que al principio el caso de la Plaza Mayor. Aparte de que es el único punto de la ciudad donde se van a autorizar expresamente las terrazas bajo soportal, prohibidas en el resto, la propuesta inicial aparecía muy amplia, prácticamente rozando ese 40% de ocupación máxima, 1.562 metros cuadrados, lo que cuando lo publicó ILEÓN levantó importantes críticas por 'comerse' excesivo espacio. La revisión actual lo deja, según estimación de los técnicos, en poco más del 306% y 1.220,24 metros cuadrados, al impedirse una posible segunda línea de terrazas hasta el interior de la plaza.
Con esta nueva cifra, otras plazas emblemáticas presentarán un porcentaje mayor de ocupación, llevándose la palma la Plaza de San Martín, el corazón del Barrio Húmedo -antigua Plaza de las Tiendas-, con un 38,5% de ocupación contemplada, algo que en este espacio supondrá casi todo el espacio peatonal próximo a los bares con veladores.
...Y alto nivel de ocupación en la Plaza del Grano o San Marcelo
En la zona del ensanche de la ciudad, otro punto muy 'goloso' como es la plaza de la Pícara Justina sumará un cómputo del 34% del espacio autorizado, y la de la Catedral quedará muy exenta, sumando según el borrador apenas un 5,5%. Pero el aspecto de otras dos plazas aumentará muchísimo con posibles terrazas respecto a la situación actual, tanto en la empedrada y tradicional Plaza del Grano, que podría alcanzar el 25,5% de su superficie, como en San Marcelo o Plaza de las Palomas, con un 23,3%. Con este porcentaje, será muy difícil recuperar San Marcelo como el tradicional punto de ferias o conciertos que con el tiempo se ha ido perdiendo.