Vaciado de la casona de Dámaso Merino
La casona de la calle Dámaso Merino, entre la Catedral y el Barrio Romántico, ya tiene quién mire para ella. Al menos para evitar un accidente por nuevos derrumbes, como los que ya se produjeron hace tres años, y amenazas constantes para los viandantes de la estrecha calle del Casco Histórico en la que está ubicada.
Después de numerosos avisos municipales a los propietarios, y la amenaza del Ayuntamiento de que se ejecutarían estos trabajos de manera subsidiaria pasando después la elevada factura de los mismos, ayer lunes se iniciaron los trabajos para el vaciado de todo el interior del edificio, cuyo estado amenazaba a la totalidad del inmueble. Los dueños llegaron a reconstruir en su día la amplia parte de la fachada que se vino abajo en abril de 2011 (se cumplen pronto tres años) y realizar ciertos trabajos de consolidación de la fachada.
La fachada debe conservarse y consolidarse y al parecer los dueños de la casona mantienen la pretensión de construir una serie de viviendas, para las cuales disponían de licencia pero que es posible que tengan que retomar de nuevo por el largo plazo transcurrido.
¿Os acordáis del susto que esta casona dio hace tres años, en los últimos coletazos de la Semana Santa que había echado a la calle a decenas de miles de personas, especialmente por el Casco Histórico? Pues este video deja ver aquel peligroso momento: