La última juguetería tradicional de León: Exclusivas Cervantes

Paquita y María Jesús, fundadora y regente actual de la juguetería tradicional en León.

Marta Cuervo

¿Te imaginas poder volver por un instante a tu infancia? ¿Sentir de nuevo la emoción al sujetar en brazos a tu muñeca preferida, o el entusiasmo de ver en funcionamiento el tren que tanto te gustaba de niño? En León todavía encontramos lugares capaces de trasladar a las personas a una de las épocas más felices de su vida, la infancia, para revivir momentos que precisamente en esta época del año -en Navidad- vuelven a nuestro recuerdo con más fuerza.

Los niños de ayer, convertidos ya en padres e, incluso abuelos, pueden seguir compartiendo sus juegos hoy, gracias a la supervivencia de Exclusivas Cervantes, una juguetería tradicional que mantiene su apuesta por los muñecos de siempre, con piezas de coleccionismo únicas y muñecas realmente de hace decenas de años que esperan en uno de los últimos escaparates de estas características en la ciudad a ser elegidas por unas manos que sepan apreciar su valor.

Un abuelo y su nieto se detienen a mirar el escaparate de Exclusivas Cervantes Juguetería.

El paraíso de los coleccionistas

Paquita abrió las puertas de este templo para los amantes de las maquetas hace 60 años, cuando decidió abandonar su carrera de maestra y dedicarse de lleno a la felicidad de los niños. Actualmente es María Jesús, su hija, quien regenta el lugar, un espacio de dos plantas en el corazón de León, repleto de juguetes en el que se puede encontrar desde una amplia sección de coleccionismo de trenes, coches y figuritas de plomo, hasta casas de muñecas con todos sus accesorios e iluminación, juguete básico, infantil y de bebé, sin olvidar las construcciones de Playmobil y Lego.

Pero este entrañable lugar no se ha quedado obsoleto y ha sabido, a su manera, adaptarse a los tiempos disponiendo también de las peticiones más actuales del público infantil, como la muñeca L.O.L., uno de los juguetes estrella de este año. A pesar de ello, su apuesta sigue siendo tradicional, como en el caso de los scalextrics clásicos, “los de toda la vida”. “Es lo que más nos solicita la gente, además porque es muy difícil de encontrar. El boca a boca y las redes sociales nos han dado mucho a conocer y ahora viene a comprar gente de toda España este tipo de artículos”, reconoce María Jesús.

Miniaturas para las maquetas de trenes.

Y precisamente el secreto para llevar tantos años abiertos, más en una época en la que difícilmente sobrevive una juguetería antigua, es ese; “trabajar cosas que las grandes superficies no tienen”. “También el trato, muchas personas prefieren el cara a cara, hay gente que compra y te cuenta muchas cosas, de su vida, a veces la tienda se convierte en un confesionario”, comenta la regente con una sonrisa, recordando que por la juguetería de su madre han visto pasar generaciones, de hijos que ahora regalan a sus hijos y nietos.

Más reconocimientos en el resto de España y extranjero que en León

María Jesús, que ha crecido entre juguetes, atesora muchas anécdotas, entre las que destaca una ocurrida hace sólo unos días: “El otro día un señor subió al piso de arriba, era de fuera de León, y se puso a mirar las maquetas. Cuando voy a peguntarle le veo sentado en el suelo y me dice: 'Yo no me muevo de aquí; esto es la segunda Catedral de León”, explica satisfecha la leonesa, que decidió continuar con el negocio familiar porque le gustan mucho los niños y el trabajo de cara al público.

Paquita, muy querida en el barrio, también recuerda cuando la Barbie se recibía de EEUU y, después de unos años cuando llegó a España, ella misma fue la imagen de la Feria Internacional del Juguete de Valencia posando junto a la famosa muñeca. “Entre todos los comerciantes de España me eligieron a mí, presidí el stand y fue un honor”, declara quien el próximo 14 de enero cumplirá 86 años. “En nuestra especialidad creo que los que menos tajada sacan son los de León, ya que somos más apreciados en el resto de España y parte del extranjero. En general, aunque siempre puede haber alguna crítica mala, la gente nos está agradecida. Son 60 años, que dan para mucho”, declara Paquita.

El 'premio' de esta vida en homenaje al mundo de los juguetes para Paquita ha sido personal, pero quizás su valor va mucho más allá de los 60 años que llevan abiertas las puertas de un negocio antiguo; hay que reconocer el valor de una mujer trabajadora, constante y que en pleno siglo XXI sigue luchando por mantener una actividad que casi se podría enmarcar en una de las vitrinas de sus expositores como artículo de coleccionista: las jugueterías tradicionales.

Muñecas tradicionales del escaparate de Exclusivas Cervantes Juguetería.
Etiquetas
stats