Los trabajadores de Everest acuerdan irse a la huelga

Miriam Chacón / ICAL Protesta de los trabajadores de Everest en las Cortes en Valladolid.

S. Gallo/Ical

Dos de las secciones de los trabajadores de Everest han respaldado en asamblea la huelga indefinida como medida de presión ante la situación que vive la empresa, para la que no se aportan soluciones, mientras los trabajadores acumulan ya varias mensualidades de impago por parte de la compañía. A falta de una nueva reunión esta tarde, la huelga es el próximo paso que se prevé que den los trabajadores, un paro indefinido que podría empezar a finales de la próxima semana.

Los trabajadores están “muy cabreados”, algo que ha quedado patente también en las asambleas celebradas esta mañana, ante la falta de soluciones y después de varios meses sin percibir las nóminas. A día de hoy, la empresa adeuda dos pagas extras y parte de una tercera, además de los salarios de diciembre y enero. En las próximas horas está prevista una reunión con el Serla y luego se prevé materializar la convocatoria de huelga, en principio para finales de la próxima semana o principios de la siguiente.

Los trabajadores lamentan una situación que “parece una guerra” y recuerdan que están dispuestos al pacto social que se les reclama, aunque piden en primer lugar que se dé el crédito a la empresa para que pueda hacerse efectivo el pago de las nóminas. “La petición es que den el dinero y nos comprometemos a firmar un documento de pacto social, siempre y cuando veamos el pago”, explicó el presidente del Comité de Empresa, Enrique Reguero.

Después de que la Junta pidiera ayer a la empresa más garantías para la concesión del crédito de 3,2 millones necesarios para Everest, Reguero lamentó que esas garantías que la empresa ha dado no sean suficientes. “Tenemos constancia de más de 40 millones que son los activos del grupo Everest, si esas garantías no son suficientes, no sé lo que pretenden”, se preguntó.

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