Con cautela, el comercio espera por las ventas de Navidad
Un entusiasmo medido tiñe por estas horas el ánimo de la mayoría de los comerciantes de León, sean pequeños representantes de las tiendas de barrio o expertos de las grandes superficies comerciales. Está a punto de comenzar el mes más importante del año para muchos rubros, vinculados con los tradicionales regalos de estas fechas.
La cautela parece primar, y aunque en algunos casos esperan incrementos, como en el Centro Comercial Espacio León, la crisis sobrevuela como un fantasma a la hora de desgranar expectativas.
Grandes superficies
En el Corte Inglés aguardan esta época con esperanza pues es la más fuerte de todo el año. “Las secciones de juguetería e informática son de las más visitadas”, aseguran. Aunque también la de moda. “Cada vez la moda es más regalo por aquello del regalo útil”, explica. Y, sobre todo, la sección de alimentación incrementa notablemente sus ventas, en especial “un tipo de alimentación más cuidada y gourmet”, explican.
En el caso del centro comercial Espacio León, esperan un incremento en las ventas que en la ciudad podría ubicarse en torno al 4 o 5% (hablan de un 3% a nivel nacional). También esperan tener una de sus semanas “fuertes” de esta campaña en los días del puente de la Constitución, además de los habituales días previos a la noche de Reyes. A la hora de adelantar estrategias, admiten que habrá promociones especiales, pero no descuentos mayores a los de otros años. Esperan que al final de la campaña cada visitante al centro comercial haya gastado alrededor de 40 euros.
Juguetes, más baratos, pero para todos
Los catálogos de juguetes inundan poco a poco los buzones de las viviendas leonesas y los anuncios de juegos y muñecas cada vez son más habituales entre el zapping de los canales de televisión pero, ¿realmente ha comenzado su venta?
La encargada de la juguetería Toy Planet asegura que es cierto que se comienzan a vender juguetes para Navidad “pero este año todavía la gente es un poco reacia a adelantar las compras”. Una de las razones que explica la dependienta es la recurrida crisis, que “sí que se nota en los bolsillos de los ciudadanos”.
Según explica la experta en juguetes, la semana estrella es la primera de diciembre, la del puente de la Constitución; “debería de ser la más fuerte en ventas”.
Estas dos semanas no están siendo demasiado buenas para los comerciantes de juguetes de la ciudad, según asegura la mayoría, que también coincide en que no se advierten muchas diferencia con el mismo periodo del año anterior. Lo que sí que tienen claro es que es tiempo de juguetes y no de otras sorpresas como material escolar. “Los niños quieren juguetes”, asegura la encargada de otra de las superficies especializadas en León.
A pesar de la ya mencionada crisis, los comerciantes esperan una “buena campaña de venta” puesto que con la llegada de la Navidad “la gente no escatima en regalos”. “Aunque el dinero sea más ajustado y el importe del juego sea menor, un niño siempre va a tener juguetes”, señala la encargada de Toy Planet.
El recuerdo de la lectura
Un sector que juega en desventaja frente al de los juguetes es el de los libros, según ha explicado el presidente de la Asociación de Libreros de León, José Antonio Sánchez, ya que no existen reclamos publicitarios en la televisión que capten la atención como ocurre con los coches, las muñecas y los juegos.
“Estamos bajo mínimos en ventas, pero tenemos muchas expectativas porque se trata del periodo más fuerte de publicación literaria del año”, asevera Sánchez.
En Navidad se pone a disposición del lector una amplia oferta en libros. Sánchez destaca las novedades que durante esta época salen a la venta del Grupo Planeta y de Plaza&Janés. Pero, a pesar de ello, el presidente de los libreros declara que las ventas durante estas semanas “no se han movido, incluso han disminuido bastante si comparamos cifras con el año pasado”
Como explicación, Sánchez acusa la falta de poder económico de muchas familias. “La gente se retrae de comprar libros porque no hay ni un euro”.
El librero también admite que a quien le gusta regalar libros lo sigue haciendo, pero “en España no existe una gran cultura del libro”.
