Ruta del Cares, un paseo por el paraíso
En el corazón de la Cordillera Cantábrica, en pleno Parque Nacional de los Picos de Europa, se extiende un sendero que capta la esencia de la naturaleza en su máxima expresión: la Ruta del Cares.
Conocida como la Garganta Divina, esta ruta une la provincia de León y el Principado de Asturias en un recorrido de aproximadamente 12 kilómetros. Iniciando desde la localidad de Caín, en León, o desde Poncebos, en Asturias, ya que el origen puede ser indistinto, este camino no es solo una ruta senderista, sino una experiencia multisensorial en todas las estaciones del año.
La Ruta del Cares es solo un paseo por la naturaleza pero también un viaje a través del tiempo. Las formaciones de roca caliza cuentan historias de épocas ancestrales, cuando estas montañas formaban parte del fondo marino. La erosión del agua sobre la caliza ha esculpido un paisaje kárstico único, lleno de cavidades y simas.
Además, cabe destacar su origen como vía de mantenimiento para canales de agua hidroeléctricos, después reconvertida en paso para el ocio, y esa huella refleja la ingeniosa adaptación de las comunidades locales a este terreno.
El cambio de estación trae consigo una paleta de colores vibrantes. Amarillos, rojos y ocres adornan el paisaje, creando condiciones ideales para la fotografía. La luz suave del otoño realza la belleza natural, haciendo de cada vista una obra de arte, pero el renacer vegetal de la primavera también es espectacular. Y en verano, más horas de luz y gran parte del recorrido en sombra lo convierten en una delicia. En lo crudo del invierno las condiciones se complican pero también permiten ver contrastes únicos.
Información de la Ruta
Al prepararse para una experiencia inolvidable en la Ruta del Cares, es crucial tener en cuenta varios aspectos esenciales para garantizar tanto la seguridad personal como el respeto por el majestuoso entorno natural, así como el cumplimiento de las normas y constantes alertas vigentes en cada momento que el Parque Nacional de Picos de Europa destaca en este enlace. Por ejemplo, cuando se produce algún desprendimiento o desperfecto en la infraestructura, que obligue a intervenir e incluso realizar cortes en la ruda para repararlos, los cuales se suelen comunicar con la mayor precisión de días y horas.
También en ese apartado de alertas el Parque Nacional aclara la normativa y las prohibiciones expresas. Por ejemplo, dadas situaciones cada vez más habituales, se recuerda que queda prohibido hacer la senda con vehículos de motor pero también con bicicletas. Igualmente, prohibido está llevar perros sueltos y tampoco el uso de correas extensibles para ellos. En ambos casos, al infractor se le puede imponer una sanción, aparte de la responsabilidad personal que tendrá si ocurre algo por no hacer caso de ambas prohibiciones.
Y consejos para realzarla
Equipo Adecuado
- Botas de senderismo: Mejor botas resistentes y cómodas, preferiblemente impermeables. Una buena tracción es vital para navegar por terrenos rocosos y posiblemente resbaladizos.
- Ropa en capas: Dado que las temperaturas pueden variar, vista varias capas de ropa que puedan añadirse o quitarse según sea necesario. Incluya prendas térmicas y transpirables.
- Chaqueta impermeable: Una chaqueta impermeable es indispensable para protegerse de la lluvia inesperada y el viento.
- Accesorios adicionales: Un sombrero y guantes pueden ser útiles durante las mañanas y tardes frías. También, considere llevar una mochila con suficiente agua, alimentos, y un botiquín de primeros auxilios.
Respeto por la Naturaleza
- Mantener la limpieza: Lleve consigo toda la basura y residuos para preservar la belleza natural del entorno.
- Flora y fauna: Evite molestar o dañar la vida silvestre. Mantenga distancia y no alimente a los animales.
- Senderos marcados: Permanezca siempre dentro de los senderos establecidos. Esto ayuda a prevenir la erosión y protege los hábitats naturales.
Planificación anticipada
- Conocimiento del camino: Estudie la ruta con anticipación. Conozca la longitud total del sendero y los puntos de mayor dificultad.
- Puntos de acceso y salida: Identifique los puntos de inicio y finalización de la ruta, tanto en Caín como en Poncebos, y planifique cómo llegará y partirá de estos lugares.
- Horarios de transporte: Infórmese sobre los horarios de autobuses o taxis en la zona, especialmente si planea realizar solo una parte de la ruta.
Al seguir estas recomendaciones, la travesía por la Ruta del Cares se convertirá no solo en un recuerdo imborrable de los paisajes de Picos de Europa sino también en un ejemplo de turismo responsable y consciente del entorno natural.
Visitar la Ruta del Cares, que en parte por su nivel de afluencia todos los años provoca algunos episodios de intervención de los medios de emergencia, es más que un simple paseo; es ser testigo de la transformación de la naturaleza. Y también es una experiencia física y emocionalmente impactante, que ofrece una perspectiva única de la naturaleza y sus ciclos.