UPL, al asalto de ser la primera fuerza en la provincia de León por la debilidad del PSOE y PP

Las elecciones autonómicas se acercan y se configuran como uno de los momentos clave del partido leonesista Unión del Pueblo Leonés (UPL), que aspira, según confesión propia en su pasada cena de navidad, a ser la primera fuerza política de la provincia. Con el panorama político nacional totalmente revuelto por los escándalos de corrupción y de acoso que acechan al Gobierno y al PSOE y la dinámica electoral del PP para medir sus fuerzas ante Vox forzando elecciones autonómicas, los leonesistas creen que hay oportunidad y hueco de seguir creciendo.

El objetivo de UPL, más allá de si son primera fuerza o no, es incrementar sus escaños en las Cortes autonómicas y tener grupo parlamentario propio. Esto se puede hacer logrando cinco escaños de los 13 de León, que sería sí o sí siendo la primera fuerza, o superar el 5% del voto en las elecciones autonómicas, algo que quizás está más cerca ya que en 2022 se quedaron en el 4,3%.

Los leonesistas estrenan cabeza de cartel, su lideresa y alcaldesa de Santa María del Páramo Alicia Gallego, aunque falta por desvelar el resto de la lista, que deberá ser cremallera por género, lo que siempre complica los encajes internos. Luis Mariano Santos, su portavoz en las Cortes las últimas legislaturas no ha confirmado si seguirá en la lista o dará el paso a un lado para facilitar renovación de caras.

Las encuestas que manejan los partidos señalan que la carrera electoral está apretada en León entre PSOE, UPL y PP, con una escasa diferencia entre ellos y que, por tanto, la carrera electoral está muy abierta, sin descartar un escenario incluso de empate a procuradores (cuatro) en cabeza.

Para los leonesistas mantener el éxito electoral de 2022 pasa por volver a ser primera fuerza política en la ciudad de León y en el alfoz, donde lograron vencer en once municipios. El temor del partido es si la gestión municipal asumida en 2023 en algunos consistorios, como es el caso del siempre complicado San Andrés del Rabanedo, les pasa factura en la cita electoral autonómica o no. Esperan que en todo caso eso se pueda compensar con crecimiento de voto en otras zonas, como en el sur de la provincia arrasado por los incendios.

El PP sigue sin desvelar si su presidente interino y consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, será el cabeza de lista de las autonómicas, como desean el resto de partidos ya que opinan que su figura está muy afectada por la gestión de los incendios y la no asunción de responsabilidades. En el PSOE nadie duda que Nuria Rubio encabezará la lista autonómica más allá de las votaciones simbólicas de las agrupaciones, ya que al final el partido configura como estima como considera conveniente la misma. En general en los partidos se considera de poco impacto electoral el nombre del cabeza de cartel electoral y si más relevante los candidtos autonómicos, en este caso el popular Alfonso Fernández Mañueco y el socialista Carlos Martínez.

El PSOE de Castilla y León ha admitido este lunes que teme impacto electoral la sucesión de denuncias por presunto acoso en el partido. El PP se ha enfrascado en adelantos electorales autonómicos para confrontar con Vox, y se espera con cierta ansiedad a conocer el resultado de las elecciones autonómicas en Extremadura este 21 de diciembre y de Aragón el 8 de febrero. Un contexto que abre a los leonesistas la puerta a acoger más votantes descontentos, con permiso de Vox que suele ser quien se beneficia en los últimos tiempos en los demás territorios. El panorama nacional revuelto hace posible cualqueir escenario a poco más de dos meses de la cita electoral, en marzo del 2026.