“Ahora le toca al PP un ejercicio de responsabilidad con el carbón”

j manuel lópez

Guillermo Murias Andonegui, (Caboalles de Arriba, Laciana, 1960) pertenece a esa generación que vivió los primeros avisos serios sobre el futuro incierto de la minería. A principios de la última década del pasado siglo la MSP estaba en quiebra. La marcha minera de 1992 cambió el curso de los acontecimientos. Murias fue de los que permaneció 52 días encerrados en el mítico pozo de Calderón, que ya es historia. Como militante de IU ocupó varios cargos orgánicos e institucionales; entre 1995 y 2003 fue diputado provincial, como regidor lacianiego y el ejemplo que el presidente de la institución, entonces el popular José Antonio Díez, ponía siempre que se refería a un político con buena capacidad de negociación. Ahora, ya al margen del discurso político, se dedica a la cría del mastín, Guillermo Murias analiza con iLeon.com una situación compleja y difícil, que en esta provincia pasa por un ejercicio de responsabilidad del PP para evitar el descalabro de miles de familias que viven del carbón.

P-La minería vuelve de nuevo al candelero, al territorio de la incertidumbre.

R- En estos momentos la situación parece un totus revolutus. Las movilizaciones han estado bien organizadas aunque hay una cierta dispersión. Yo creo que es el momento para que el PP, si no se quiere cargar de un plumazo las cuencas mineras, debe hacer un ejercicio de responsabilidad. Los mineros, los sindicatos, la sociedad, todos deben permanecer unidos porque es la forma más eficaz para que la presión dé resultados, pero la pelota ahora está en el tejado del PP.

P- En caso contrario el cataclismo para algunas comarcas seria tremendo.

R- Está en juego el futuro de muchas familias, de una forma de vida que no se puede cambiar de golpe, una forma de producción y de generar riqueza que de hecho es un monocultivo, pese a todos los recursos que han gastado en intentar salir de esta situación.

P- Supongo que no ayuda mucho la propuesta del Gobierno de suprimir las juntas locales y las entidades menores.

R- Todos estos planes ahogan un poco más el futuro de toda la zona rural de la provincia, que sustenta su maquinaria administrativa en estas entidades. Y no se trata de un problema de dinero, porque no gravan las arcas del estado. Tal vez es el momento adecuado para un consenso que debería abarcar e incluir a todo el espectro social y económico de la provincia, sin distinción de colores.

P- Todo ello en un momento en el que ni los votantes del PP están nos conformes con las medidas del gobierno de Rajoy.

R- Estamos en un momento tan crucial y difícil que todos los reproches, por muy justificados que sean, no sirven para nada. Ahora sobran. Tenemos que centrar todo nuestra atención en saber qué pasa y cómo se sale de esta.

P- ¿Es posible?

R- Lo primero que hay que identificar es contra quién estamos luchando. Por un lado nos empujan al barranco y te obligan a despeñarte y sino te despeñas te siguen apretando hasta no se sabe cuándo. Esta en quiebra la economía y el sistema. No podemos seguir en un barco en el que no sabemos hacia donde nos lleva. Tal vez en vez de seguir así, a la deriva, sin horizonte y guiados por una UE que nos conduce a estrellarnos, debemos tomar decisiones como si nos conviene o no seguir en el concierto del euro. Y a lo mejor es el momento de romper la baraja del euro.

P- ¿Cree que la paciencia del ciudadano tiene un límite?

R- Es evidente que la tensión ha subido de grados, aunque hasta el momento las movilizaciones han sabido demostrar, de manera pacífica, que la mayoría de los ciudadanos no entiende que los recortes impuestos sean la única doctrina política y por eso pide un cambio; es aquí donde entra en juego la unión de toda la sociedad para exigir otra forma de hacer política que no tenga por objeto fulminarnos, como así parece.

Guillermo Murias Andonegui recuerda con agrado, pero sin deseo alguno de volver a la primera plana, más de una década dedicado de lleno a la política. Ahora la cría de mastines, que como es lógico pregona, como no podía ser de otra forma, en su propia página web, copa toda su atención. Dice que los mastines son una raza muy noble. Seguro que es cierto.