La Junta de Castilla y León reclamó hoy un acuerdo al “máximo nivel” en la Unión Europea para resolver la crisis de precios en el sector lácteo ante el fin de las cuotas por considerar que los ejecutivos central y autonómico no pueden imponer unos precios mínimos por ir en contra del ordenamiento español y comunitario.
En la rueda de prensa posterior a la primera reunión del Consejo de Gobierno tras las vacaciones estivales, la vicepresidenta y portavoz, Rosa Valdeón, abogó por que sea la Unión Europea quien “tome la palabra” para resolver la crisis láctea y por que hablen las partes, la industria transformadora y los productores de leche. “El Consejo de Ministros de la Unión Europea tiene que abordar el asuntos con seriedad”, defendió.
Valdeón reconoció que la liberalización de precios no es una oportunidad para el sector debido a que la caída no cubre los gastos y lleva a que las explotaciones no sean viables, si bien reiteró que la solución pasa por el acuerdo entre los países productores de la Unión Europea, después de que Francia haya fijado unos precios mínimos.
La solución francesa, que el Gobierno central se comprometió a analizar, no es viable según la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia porque los precios no se pueden pactar ya que la medida sería contraria al ordenamiento jurídico español y comunitario. Ante ello, la Junta de Castilla y León, a través de su portavoz, insistió en la necesidad de un “gran acuerdo de mínimos” en el seno europeo.
Valdeón manifestó que la consejera de Agricultura y Ganadería, Milagros Marcos, está en contacto con las asociaciones de Castilla y León pero reiteró que el Ejecutivo no puede imponer medidas en relación a los precios. En relación a lo que puede hacer la Junta, señaló la mediación entre las partes porque “no hay medidas que se puedan imponer”.
Precisamente, la ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, anunció que el próximo 28 de agosto se reunirá en Madrid con sus homólogos de Francia, Italia y Portugal para alcanzar consensos ante el Consejo de Ministros Extraordinario que sobre este asunto se celebrará en Bruselas el próximo 7 de septiembre.