El portavoz del Grupo municipal Socialista en el Ayuntamiento de León, José Antonio Díez, recordó hoy que casi 900 días después de su toma de posesión, el alcalde de la ciudad, Emilio Gutiérrez, no ha cumplido las más importantes de las 100 medidas a las que se comprometió en sus 100 primeros días de Gobierno municipal. “Se puso un reto fácil para esos tres primeros meses de Gobierno, pero ni siquiera así ha cumplido su compromiso”, denunció.
En el día en el que se cumplen dos años de la elección de Rajoy como presidente del Gobierno, Díez recordó que el alcalde de León no ha sido recibido por el jefe del Ejecutivo pero tampoco por el máximo responsable de la Junta que “oficialmente no ha mantenido ningún encuentro directo con el regidor municipal”, añadió. Lo que refleja esta situación, a juicio de Díez, es la “falta de respuesta positiva” a las demandas de los leoneses porque “ni una obra, ni una inversión ni un proyecto prospera en León desde que el PP rige los destinos de esta ciudad”.
El portavoz del PSOE incidió también en la “falta de sintonía” del alcalde con los consejeros autonómicos que “ningunean sistemáticamente” al alcalde de León, a lo que éste “responde con la sumisión”, a pesar de lo que Emilio Gutiérrez tampoco consigue que se logren proyectos para León. “El alcalde ni siquiera consigue que Silván abone lo que debe para el Palacio de Congresos y eso que es al único al que reivindica como consecuencia de la mala relación del consejero leonés con la presidenta de la Diputación”, recordó Díez.
Entre las medidas del alcalde incumplidas, Díez aludió al impulso del Teatro Emperador como centro de Artes Escénicas, la reunión con Paradores, el impulso a la autovía León-Valladolid, la creación de un órgano de coordinación de las pedanías, o el muy publicitado consejo de alcaldes.
La lectura de las 100 medidas, dos años y medio después de su publicación, “son otra tomadura más de pelo para los leoneses”, porque incluir ahí que se impulsarían las actividades culturales y comprobar lo que se ha hecho, con la anulación de todos los festivales, la reducción de las actividades y el encarecimiento de todas las entradas parece “una burla”, como lo es el respaldo al comercio leonés o la mejora de calles, parques y jardines, añadió.