El Gobierno renuncia a la construcción de la unidad de madres de la cárcel de Mansilla
El Consejo de Ministros aprobó este viernes el acuerdo por el que se revisa el Plan de Amortización y Creación de Centros Penitenciarios (PACEP) y que supone la renuncia a la construcción de la unidad de madres en el centro penitenciario de Mansilla de las Mulas (León) “por no ser necesario”. Además, la cárcel leonesa será objeto de obras de mejora junto a los centros de Brieva (Ávila) y Topas (Salamanca).
La revisión del PACEP -un plan elaborado en1991 y que se actualiza de forma periódica- supone que Interior prescindirá de la puesta de esta unidad de madres en el centro de Villahierro, un módulo específico en el interior del centros penitenciarios para permitir la convivencia entre madres y sus hijos menores -hasta los 36 meses- y que estaba proyectado para acoger a una treintena de mujeres, con un presupuesto previsto de seis millones de euros.
Según el acuerdo, se prescinde también de la construcción de diez centros de inserción social y se aprueba la orden de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias en 2012 de reducir la superficie construida, eliminar elementos suntuarios como las piscinas y otros que incrementan el coste de edificación y mantenimiento y no redundan ni en la mejora de seguridad del Centro ni en incrementar su capacidad de rehabilitación de los internos.
Con el ahorro generado por las actuaciones descritas -unos 96 millones de euros- se van a acometer obras de mejora en materia de seguridad, salubridad y eficiencia energética en 39 centros penitenciarios, entre los que se encuentran tres de Castilla y León, el de Mansilla (León), Brieva (Ávila) y Topas (Salamanca).
