Un error de impresión que nadie fue capaz de ver ha vuelto a complicar las cosas al partido político Vox a pocas horas de la apertura de las urnas electorales, nuevamente en este caso en la capital leonesa.
La Junta Electoral de Zona de León ha emitido una resolución respecto a la consulta que la formación política había hecho, sobre si admitiría en la noche electoral como válidas las papeletas buzoneadas en los hogares, encabezada por Blanca Herreros, en las cuales faltan dos nombres respecto a los oficialmente aprobados.
Se trata en concreto de la 'desaparición' de los candidatos con los números los correspondientes a los puestos 26 y 27, es decir, Alfonso Soto Fernández y Luisa María Suárez Diez, que sí aparecían en las listas oficializadas por el Boletín de la Provincia dentro del plazo legal.
En su resolución, el órgano judicial encargado del proceso responde a Vox con la decisión final de no permitir la validación de las papeletas incompletas, que llegaron a ser decenas de miles para ser repartidas en unos 130.000 hogares del municipio de la capital leonesa. «Las papeletas electorales deben contener todos y solos los candidatos proclamados“, remarca la Junta Electoral de León en su respuesta. Un motivo por el que finalmente acuerda ”no validar la papeleta confeccionada por el partido político Vox referente a la elección de concejales en la circunscripción de León“ dado que adolece de ”no cumplir con los requisitos“ que se establecen de manera legal.
La formación asume el problema creado “no sabemos si en Madrid o con la imprenta con la que trabajó Madrid”, explica la cabeza de lista, la abogada Herreros. Pero aunque asumirlo no significa que comparta la decisión final, por lo que avanzó que “vamos a dar toda la batalla legal, hasta el final” por conseguir que las papeletas incompletas se admitan, imponiéndose el criterio de que quien las introduzca en una urna en las municipales “tiene la cara voluntad de votar a Vox”.
“Batalla judicial”
Una esperanza final que ayer compartía y avanzaba en su visita a León el vicepresidente primero de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé, , confiado en que la Junta Electoral confirme la validez de las listas buzoneadas. “No entendemos que pueda haber otra solución, siguiendo la doctrina de la Junta Electoral Central, porque esa papeleta refleja la voluntad del votante de votar a Vox y a toda su lista”, dijo, pocas horas antes de que esa Junta Electoral leonesa resolviera justo en sentido contrario y dijera 'no'.
La “batalla judicial” a la que se refiere la candidata por León se materializará en el plazo de 24 horas en un recurso ante la propia Junta Electoral de León, que dispondrá de otro día para una nueva y ya definitiva resolución por su parte. En caso de mantener cerrada la opción de admitir las papeletas incompletas, el recurso ya se tendría que elevar a la Junta Electoral Central, como Vox León confirma que hará llegado el caso.
Sin embargo, mientras la formación ya está intentando por todas las vías posibles que el menor número de votantes posible no meta la mala papeleta en la urna el domingo. Y para ello, por un lado, lo está aireando en sus redes sociales instando a que “no la uses”, reza el mensaje, instando a que en la sede se pueda cambiar por la buena.
Además, Blanca Herreros también avanza que en “los dos días que quedan, en los actos en la calle también cambiaremos todas las que podamos” aprovechando el encuentro con los vecinos que pasen por sus carpas. Para ello, se han acelerado la impresión de nuevos miles de papeletas correctas en la esperanza de poder cambiar unas por otras en el mayor número posible.
El fiasco de hace cuatro años
Hay que recordar que hace cuatro años Vox también tuvo tuvo que litigar, hasta la última instancia, en aquel caso con escaso éxito final, ya que pretendía que a su favor contasen votos erróneamente atribuidos a su formación cuando en realidad eran para el PSOE, como así finalmente se certificó. Y eso dejó sin ningún concejal a la formación en el Consistorio leonés y la puerta abierta al pacto que permitió a los socialistas gobernar estos últimos cuatro años. Vox agotó hasta la última instancia, incluso dijo apela al Tribunal Constitucional, cosa que no cambió nada.