El PSOE ha comenzado fuerte su apuesta por ganar la provincia de León en la cita electoral autonómica que tendrá lugar como máximo en marzo del 2026. Cinco visitas del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; la sede de una de las apuestas del Gobierno, el pacto de estado de Emergencia Climática; o el lanzamiento de la precampaña de su candidato a la presidencia de la Junta, el soriano Carlos Martínez, son ejemplo de la apuesta socialista por llevarse la victoria leonesa. La reunión de la Diputación de León con el ministro de Transportes, Óscar Puente, debe interpretarse más bien en clave de la salud interna del pacto PSOE-UPL.
Que la provincia de León será uno de los principales lugares de disputa electoral no es una especial novedad, pero los socialistas consideran que los peores incendios de la historia de la provincia se han convertido en una oportunidad para obtener un resultado electoral a la par que el Partido Popular en toda la comunidad y ganar holgadamente en León. Incluso hay quien defiende en el partido socialista que una victoria en votos en Castilla y León al PP es posible, como en 2019, en unas circunstancias de ultrapolarización.
Los incendios y la cuestionada gestión del consejero de Medio Ambiente y presidente interino del PP de León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, han elevado la moral interna de los socialistas, que creen que pueden ser los principales beneficiarios electorales de las críticas a la Junta de Castilla y León. Los socialistas consideran que estarán por encima de los leonesistas de UPL, a los que se suele apuntar como los otros grandes beneficiarios, pero que de momento mantienen un perfil electoral más bajo hasta el momento.
Aunque haya sido por una mera casualidad, los grandes incendios han afectado especialmente a territorios bajo gobiernos municipales del PSOE como Villablino, Puente de Domingo Flórez, Murias de Paredes, Igüeña, Carucedo, Páramo del Sil, lo que posibilitaría a los socialistas mantener su espacio de voto en El Bierzo y las zonas mineras, que históricamente son su gran caladero de votos. Si el crecimiento en estas zonas de UPL no es muy significativo, como creen que sucederá, la victoria electoral está garantizada, señalan fuentes del partido.
El próximo domingo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visitará León por quinta vez en dos meses para respaldar al alcalde de Soria, Carlos Martínez, como aspirante socialista a dirigir la Junta de Castilla y León, que está en manos del PP desde el año 1987. Será el pistoletazo oficial de la precampaña que se alargará hasta marzo si no hay adelanto electoral, del que no hay atisbo aunque la decisión siempre está en manos del presidente Mañueco.
Para darle a conocer el PSOE ha lanzado una campaña, 'Un alcalde para Castilla y León', dejando ver su perfil municipalista como alcalde de Soria, un cargo que no dejará hasta asumir el acta de procurador, ha señalado. En el PSOE son conscientes de que el poco tiempo que lleva en el cargo, desde enero de este año, y la dispersión geográfica de Castilla y León no juegan a favor de su conocimiento pero creen que su perfil de gestor y el momento que vive el PP autonómico y nacional pueden favorecerles. La número dos de Martínez, Nuria Rubio, será la más que previsible cabeza de cartel electoral socialista por la provincia leonesa.
Perfil bajo del PP
El PP aspiraba a obtener hasta seis de los trece procuradores en las Cortes autonómicas antes de los incendios pero ahora el partido ha optado por un perfil bajo. Suárez-Quiñones mantiene un perfil bajo en la provincia leonesa, hasta el punto de haber tenido más actos en Valladolid que en su provincia natal desde que reapareció tras lo peor de los incendios. Para acudir a las localidades más afectadas por la pérdida de viviendas el Gobierno autonómico ha optado por mandar a un perfil tan desconocido como la directora general de vivienda, ajena a la polémica por la gestión de los fuegos.
En el PP esperaban que la situación escampara a lo largo del otoño pero el 'efecto Mazón' se alarga y en el partido hay quienes piensan que mientras siga al frente no habrá muchas posibilidades de sacar cabeza. De momento, el presidente del PP y de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ha optado por mantenerle y respaldarle, aunque el propio Quiñones ha evitado confirmar si encabezará la candidatura del PP en marzo, expresando su deseo de que así sea pero dejando todo en manos del partido.
A nivel autonómico las dos encuestas publicadas tras los incendios, de La Razón y El Español, pintan ambas un panorama muy similar al que surgió de 2022, con el PP con más ventaja pero dependiendo de Vox para gobernar.
El consejero Suárez-Quiñones sigue además intentando defenderse de las críticas de oposición y sindicatos a su gestión, pese al anuncio del presidente Mañueco de que el operativo pasará a ser 100% público en un plazo de tres años. Mantiene que lo sucedido el pasado verano, con tres semanas de infierno en la provincia que arrasaron más de 100.000 hectáreas, provocaron tres muertos y la pérdida de parte de su patrimonio natural y cultural, fue una excepción por circunstancias “nunca vividas”.
Según el consejero, la Junta sí aprendió tras los graves incendios de la sierra de la Culebra en Zamora en 2022, afirmando que el servicio de extinción obtuvo unos “resultados extraordinarios” en los años 2023, 2024 y en 2025, “salvo las tres semanas de agosto”. “Está claro que, si se producen circunstancias tan excepcionales como las de las tres semanas de agosto, tenemos que aumentar las capacidades y en ese aumento de capacidades se ha considerado necesario tomar estas decisiones”, ha señalado sobre el nuevo plan de operativo público, promesa de la que recelan sindicatos y trabajadores.
En UPL mantienen optimismo de cara a la próxima cita electoral tras su éxito del año 2022, donde lograron ganar en la ciudad de León y otros diez municipios del alfoz. El partido no ha despejado todavía quién encabezará la lista a las Cortes, si su lideresa Alicia Gallego o su número dos y candidato en los últimos comicios, Luis Mariano Santos. De ser ella sería la única candidata de las formaciones con presencia en las Cortes, lo que le convertiría en la única presencia femenina en los debates electorales obligatorios por ley. La única duda de los leonesistas con la cita electoral, en la que se muestran convencidos de crecer en votos e incluso escaños, es si algunas gestiones municipales les pueden pasar factura electoral o si la presencia de otros rivales en el espacio político pueden afectarles por el sostenimiento del pacto en la Diputación, frecuente dardo en círculos leonesistas.
En el extremo derecho del tablero Vox asiste a un aumento constante de sus consideraciones electorales según todas las encuestas nacionales, aunque las publicadas en Castilla y León hasta el momento les mantienen o incluso les bajan un poco. Se baraja al principal cargo institucional del país, el presidente de las Cortes Carlos Pollán, como posible candidato de la formación de Santiago Abascal a la presidencia de la Junta aunque en este caso estará la duda de si Pollán sigue encabezando la lista por León o se va a la de Valladolid, como hizo el partido con Juan García-Gallardo, que aunque es burgalés se acabó presentando por la provincia pucelana. A su favor tienen que todas las encuestas les señalan como imprescindibles para la gobernabilidad con el PP, que aspiraba a otro escenario donde también pudiera elegir partidos como UPL o Soria Ya como ocasionales socios de legislatura.