Dicen los expertos que este otoño de 2016 tendrá este tiempo

La Agencia Estatal de Metereología (AEMET) previó hoy unos meses de octubre, noviembre y diciembre con temperaturas “superiores a los valores normales”, aunque las precipitaciones caerán de forma habitual al resto de años. Sin embargo, estas lluvias y tormentas podrán ser “más irregulares” y de duración “corta” a consecuencia del cambio climático, avisó el delegado territorial de la agencia, Juan Pablo Álvarez.

Sin embargo, el otoño, que comenzará hoy a las 16.21 horas, lo hará con temperaturas altas y precipitaciones “poco importantes” durante esta semana y la siguiente. Las lluvias se concentrarán, generalmente, en el norte de la Comunidad debido a un frente que estará en Galicia durante este fin de semana y que tendrá su mayor impacto este domingo, indicó Álvarez.

Durante el otoño los días con y sin precipitaciones convivirán en periodos cortos de tiempo, pero los primeros irán apareciendo cada vez “con menos frecuencia” si se sigue la tendencia actual, señaló Álvarez. Según explicó el delegado territorial, el equilibrio meteorológico actual puede cambiar a otro debidos a los posibles cambios en la composición de la atmósfera, el mar y la criosfera, que conforman la teoría del cambio climático, hipótesis que, para Álvarez, puede ser una realidad en un futuro.

Respecto a este verano, la AEMET anunció que ha sido una estación “muy cálida y seca” en la Comunidad. En las zonas del oeste de Zamora y Salamanca y en El Bierzo las temperaturas alcanzaron el grado de “extremadamente calurosas”, razón por la que en esas áreas se ha registrado una mayor cantidad de incendios, señaló Álvarez.

Verano

El delegado apuntó que este verano ha sido “el cuarto más caluroso” en Castilla y León desde 1971 y, concretamente, el mes de agosto ocupo la quinta posición en este ranking desde el mismo periodo de tiempo. Sin embargo, fue en juio cuando se superaron los 40 grados, añadió.

En junio, el delegado territorial señaló que empezó “fresquito” y que, incluso, llegó a haber “heladas” en el sur de la Comunidad. Además, el verano, que comenzó el 21 de ese mes, se inició con un descenso de temperaturas que hizo temer por no tener una época estival cálida. Sin embargo, añadió Álvarez, el mes se saldó con un mercurio 0,5 grados superior a lo habitual.

Durante el mes de julio la AEMET destacó que, aunque las temperaturas máximas fueran “superiores a lo normal”, las mínimas conservaron la situación habitual. El delegado también destacó que, entre el 24 y el 28 de julio, se registraron la temperatura más alta y más baja del verano en la Comunidad.

Además, destacó también que, a partir del pasado día 20, la agencia emitió los primeros avisos en Castilla y León y comenzaron a aparecer las “noches tropicales”, en las que el mercurio no baja de 20 grados, en la provincia de Ávila. Estas noches se extendieron por Castilla y León durante el mes de agosto, periodo en el que también aparecieron tormentas de verano, añadió Álvarez.

En agosto, el delegado territorial indicó que se mantuvo la misma situación que se registró en el mes anterior, alcanzando una media de 21,2 grados en la Comunidad, 0,6 grados más de la media histórica. Respecto a la primera quincena de septiembre, Álvarez destacó la normalidad de las altas temperaturas y recordó que hubo años “más calurosos”, como, por ejemplo, en 1966, que la media fue superior a los 30 grados.

Precipitaciones

Respecto a las lluvias caídas durante la época estival, la AEMET indicó que cayeron una media de 26 litros por metro cuadrado entre los meses de junio, julio y agosto; cantidad que corresponde a solo un 35 por ciento de la media habitual, que se sitúa en 71 litros por metro cuadrado. El delegado añadió que hubo zonas, como Ponferrada (León), en los que no cayó “ni una gota”, literalmente, durante periodos de un mes.

“Prácticamente todo lo llovió en junio”, afirmó el delegado territorial, quien señaló que cinco de esos 26 litros se registraron en agosto, mes en el que hubo más tormentas de verano. En este sentido, destacó que en municipios como Castrogonzalo (Zamora) y Arenas de San Pablo (Ávila) hubo “reventones”, vientos y descensos bruscos de temperaturas causados por precipitaciones

La AEMET también sostuvo que el año hídrico 2015-2016 cerró con un balance positivo, en el que los recursos de Castilla y León estuvieron al 100 por ciento e, incluso, alcanzaron el 125 por ciento en el oeste de la Comunidad. Según Álvarez, la obtención de estos datos se debe a las intensas precipitaciones caídas durante el pasado mes de enero.

Respecto al año agrícola, el delegado territorial destacó la variedad de precipitación acumulada registrada según las zonas de Castilla y León. Mientras los valores máximos tuvieron lugar en la zona norte, especialmente en las cordilleras; en provincias como Valladolid, Segovia y Ávila cayeron las menores cantidades de lluvia.

Durante el acto también estuvo presente el subdelegado del Gobierno en Valladolid, Luis Antonio Gómez.