La carta de Comisiones Obreras de León demandando más atención a la crisis que sufre León
Casi un mes después de la manifestación del 16F, y ante la insultante pasividad de administraciones públicas y partidos políticos mayoritarios para hacerse eco de la necesidad del Plan de Emergencia de Inversión Pública que apoyaron sobre el papel, desde CCOO León insistimos en su urgencia.
Nos acusan las administraciones de alarmismo al decir “León se muere”, como si de una mentira se tratase. No hay más que pasearse por las comarcas mineras para evidenciar esta agonía, con la mayoría de la población joven fuera y con una población envejecida que convierte las pensiones en el principal soporte económico. ¿Cuánto margen de tiempo hay? ¿Qué futuro puede desarrollarse si la apuesta es al envejecimiento?
Desde CCOO León insistimos en que la única solución viable pasa por un Plan de Emergencia de Inversión Pública. La provincia de León fue uno de los principales motores económicos del país, con la explotación de recursos mineros que generó inmensas fortunas y que, sin embargo, no revirtió en el desarrollo de la provincia. Su desmantelamiento, además, fue un trampantojo de inversiones que, como los MINER, debieron ser inversiones complementarias a la inversión que ya de por sí debían hacer las administraciones. Pero eso nunca fue así.
Para Elena Blasco Martín, Secretaria General de CCOO León, “nos muestran listas y listas de inversiones, cifras y proyectos, de los cuales muchos se repiten sobre el papel porque nunca se ejecutan. Lo que ocurre es que León arrastra un déficit de inversión desde hace décadas, cuya brecha ha ido contribuyendo a generar una situación de crisis y declive más que evidentes. Por eso reclamamos que, junto a la inversión periódica que debe realizarse en cualquier territorio, León necesita un esfuerzo extra a través de un Plan, que compense la ingente inversión prometida y necesaria que nunca se realizó”.
El carácter de Emergencia del plan está vinculado a la propia situación crítica de la provincia, cuyo deterioro se acelera y cuyo margen de maniobra es cada vez más pequeño. Desde el sindicato, además, apelan a la Inversión Pública por ser la administración la única capaz de movilizar los recursos necesarios para intervenir con contundencia, como se ha demostrado en otras ocasiones.
La apuesta reindustrializadora que se ha realizado hasta ahora, además de escasa, se ha centrado en un modelo de “coge la pasta y vete”, es decir, trasvase de fondos públicos a empresas privadas que, tras cobrar las subvenciones correspondientes, cierran sus sedes aquí, dejando a las y los trabajadores en la calle y deslocalizando la empresa a otro lugar donde repetir el proceso. El goteo de empresas que han utilizado este mecanismo en la provincia es constante y permanente, y la falta de control y de exigir responsabilidades por parte de las administraciones públicas ha sido evidente.
Por ello, desde CCOO apuestan por un modelo desde lo público, que establezca empresas públicas con carácter estable, generando empleos de calidad y fijando población. Además, es fundamental que se haga a través del desarrollo de sectores estratégicos adecuados a la realidad material de las distintas comarcas de la provincia, con preferencia para los ámbitos rurales. Esto implica, además, la necesidad ampliar y mejorar todos los servicios públicos en la provincia, donde es más que evidente la falta de personal y de recursos, especialmente en los pueblos. Ningún modelo de desarrollo para la provincia puede triunfar con los cierres de consultorios médicos y de colegios, carencias de especialistas médicos, escasez de residencias públicas o nula oferta de ocio, entre otras cosas, tal y como está sucediendo actualmente.
Elena Blasco insiste en que “hay una Reindustrialización pendiente, prometida por todos y realizada por nadie. Se cerraron las minas, se prometieron empleos y se ríen de la gente. Están esperando a que el envejecimiento de la población provoque la desmemoria para incumplir sus promesas y su responsabilidad. Y mientras tanto, se prescinde de servicios públicos, se aumenta la brecha social y se mantienen obsoletas las infraestructuras para provocar un mayor aislamiento de las comarcas”.
Para CCOO León, la inversión en infraestructuras es otro pilar fundamental y pendiente, en una provincia extensa y con una orografía compleja que dificulta la propia conectividad de su territorio. Es sintomático el estado de las carreteras, los abusivos peajes y la voluntad de cerrar FEVE, entre otros ejemplos.
En definitiva, desde CCOO León reclaman una respuesta desde lo público, con una intervención que garantice el Estado del Bienestar y la equidad social para los habitantes de la provincia. Señalan que, en el actual modelo socioeconómico capitalista, León no tiene futuro más allá de las inversiones privadas en la explotación de recursos energéticos y agroalimentarios que no generen ningún puesto de trabajo. Es, por tanto, fundamental apelar a reequilibrar la balanza mediante modelos de economía social y de apuesta pública, que aprovechen los nuevos nichos de empleo y las propias riquezas de la provincia.
Eso es lo que todos apoyaron el 16F y que, ahora, exigimos se cumpla, pues lo contrario supone que su único interés era la foto y nuevamente las promesas vacías.