La versión teatral de 'El nombre de la rosa' llega hoy al Auditorio de León

L. Castellanos

Trasladar al escenario una obra tan compleja, tan densa y tan rica en detalles y matices como 'El nombre de la rosa', la obra que hizo popular internacionalmente a Umberto Eco, era casi una idea descabellada. Sin embargo, Garbi Losada, dramaturga y directora realmente experimentada y a la que avala una trayectoria amplia y salteada con numerosos premios (actualmente también tiene en cartel 'El hijo de la novia'), no se arredró ante proyecto tan ambicioso, se puso manos a la obra y finalmente, bajo el auspicio de Ados Teatroa (su compañía de cabecera y para la que ha realizado la mayor parte de su labor teatral) y de productoras como Tres Tristes Tigres, La Nave Producciones y Al Revés Producciones, acabó conociendo estreno y disfrutando de una excelente presencia comercial sobre las tablas españolas.

La novela causó auténtica conmoción en su momento.Acabó convirtiéndose en un éxito mundial, con más de treinta millones de ejemplares vendidos y traducción a cuarenta y siete idiomas. Tal es así que el cine no se sustrajo a su éxito y Jean-Jacques Annaud filmó, con Sean Connery a la cabeza del reparto, la historia en 1986, también con una repercusión internacional realmente relevante. Lo cierto es que asumir la adaptación de esta pieza literaria al medio teatral se convertía en una auténtica responsabilidad y también en todo un reto. Y a la vista de las críticas recibidas Losada ha salido airosa de trance tan complicado. Y ahí, sobre el escenario, queda perfectamente desarrollada esa historia de detectives, esa trama policiaca, que se sacó de la manga Eco y que ambientó en la Edad Media, conquistando el interés de miles y miles de lectores de todo el mundo y desatando toda clase de expectaciones.

Garbi Losada ideó una puesta en escena basada principalmente en un espacio escenográfico singular y en el trabajo de los actores. La suma de ambos debía derivar en un espectáculo teatral sólido y sin fisuras que persiguiera fielmente la historia original y no dejara evacuar nada de su espíritu y su fundamento. Juan Fernández, de sobra conocido por el gran público gracias a sus apariciones televisivas (en series como 'Tierras de lobos', por ejemplo) y en posesión de una biografía artística que le ha permitido afrontar numerosos montajes teatrales (bajo la dirección de nombres tan prestigiosos como Magüi Mira, Pérez de la Fuente o Alvaro Lavin, entre otros) y propuestas cinematográficas, asume la posesión de un personaje tan carismático como Guillermo de Baskerville, ese fraile franciscano que, en compañía de su discípulo Adso de Melk (encarnado por Guillermo Barrientos, quien ha ido abriéndose espacio en el universo de la interpretación), llega a una abadía benedictina situada en los Alpes italianos, famosa por su biblioteca. El deberá organizar, por encargo del Papa, una reunión entre los delegados de este y los líderes de la orden franciscana en la que se discutirá sobre la supuesta herejía de la doctrina de la pobreza apostólica, promovida por una rama de la orden franciscana, los espirituales. A su llegada, recibirá la solicitud del abad, dada su fama de hombre inteligente, intuitivo y perspicaz, de investigar la extraña muerte de un monje. A partir de ahí, la historia se irá enmarañando y provocando nuevos enigmas, vinculados a un libro de Aristóteles que se suponía perdido, a los que Guillermo, cual Sherlock Holmes, asaltará. La historia es de sobra conocida y a pesar de ello mantiene vivo el interés hasta su desenlace. Garbi Losada ha recurrido un plantel muy solvente para caracterizar a la singular comunidad que puebla la abadía. No es habitual en el teatro actual trabajar con tantos actores pero resultaba necesario para dar fondo a la historia y conquistar el interés y la complicidad del público. Así, a los citados Juan Fernández y Guillermo Barrientos, se suman en esta versión teatral de 'El nombre de la rosa' Miguel Munarriz, Koldo Losada, José María Asin, Pedro Penco, Javier Merino, Kandido Uranga, David Gutiérrez, César Novalgos, Jorge Mazo e Inma Pedrosa.

La trama de 'El nombre de la rosa' queda articulada en torno a la presencia de un libro que versa sobre la comedia, el segundo volumen de la Poética de Aristóteles. Por ello, el espacio escénico contempla la idea del libro y así lo plasma reproduciendo sobre el escenario un gran libro sobre el que va desarrollándose toda la acción mediante su apertura y despiezamiento a la manera de un acordeón para ubicar así los diferentes escenarios de los que se sirve la historia: el claustro, la iglesia, las celdas, la biblioteca, el scriptorium...Se trata de una escenografía de carácter tridimensional que elude el inmovilismo y destaca por su versatilidad. Por supuesto, el vestuario cobra gran protagonismo en la matización de la puesta en escena de una obra que hoy llega al Auditorio de León incorporada a su programación teatral para este trimestre.

Dossier de la obra http://www.adosteatroa.com/documentos/Dossier_El_nombre_de_la_rosa.pdf

Lugar: Auditorio de León. A las 21 horas

Día: 5 de noviembre de 2014

Entradas: 21 euros